Irapuato, Guanajuato – Una camioneta cargada de combustible se incendió cuando presuntamente fue baleada durante una persecución con agentes de Seguridad Física de PEMEX y provocó pánico en las escuelas.
El hecho ocurrió cerca de las 10:30 de la mañana de este miércoles en la calle Real esquina con la calle Morelos, en la comunidad Molino de Santa Ana.
Vecinos escucharon detonaciones por arma de fuego y el incendio de un vehículo y reportaron al sistema único de emergencias del 911.
Rápidamente se movilizaron policías municipales, personal de Protección Civil y dos motobombas con socorristas de Bomberos.
Bomberos sofocaron el fuego de la camioneta, sin embargo, ya estaba calcinada e incluso, debido a la intensidad de las llamas, la techumbre de un domicilio resultó afectada.
Rápidamente se fueron sumando agentes de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, quienes sumaron al menos medio centenar de uniformados.
¿Cómo ocurrieron los hechos?
De manera extraoficial se sabe que los hechos se originaron cuando personal de Seguridad Física de PEMEX le marcó el alto al conductor de una camioneta sospechosa, debido a que transportaba dos contenedores, cada uno con mil litros de combustible.
Al marcarle el alto el conductor huyó con el vehículo y comenzó la persecución.
Fue sobre la calle Morelos, presuntamente Seguridad Física disparó al menos en cuatro ocasiones con el objetivo de detener la marcha de la unidad, pero las balas generaron el incendio de la camioneta. El conductor huyó a pie y se perdió entre campos de cultivo.
Causa pánico a alumnos en las escuelas
Decenas de familias de la comunidad Molino de Santa Ana, salieron de sus domicilios ante el ruido de las torretas de las decenas de patrullas que poco a poco iban llegando al sitio.
Hasta este momento en la zona se encuentra un fuerte despliegue de agentes de seguridad de los tres órdenes de gobierno a fin de dar con el responsable.
Evacúan un kinder y ayuda la Guardia Nacional a sacar a los pequeños
Alumnos del kínder Fray Pedro de Dante, ubicado a espaldas de donde ocurrieron los hechos, fueron evacuados por maestros, personal de la institución, con el apoyo de los agentes de la Guardia Nacional, debido a que desconocían la intensidad del hecho.
De voz en voz los padres de familia al enterarse de la situación acudieron a la institución para ir por sus hijos a la escuela.
Las clases de una escuela primaria ubicada a dos cuadras de donde ocurrió la balacera, también fueron suspendidas.
Madres de familia informaron a AM que la desesperación de los alumnos fue a tal grado que muchos de ellos salieron corriendo de la institución, por lo que se inconformaron por la detonación de las armas de Seguridad Física de Pemex.