Irapuato, Guanajuato.- Por su trabajo, Julio César Rodríguez de 37 años tuvo que retrasar la aplicación de su vacuna de refuerzo contra COVID-19 y apenas tuvo oportunidad, fue al módulo de la Plaza Fragaria para obtener su dosis.
La aplicación de su refuerzo se hizo sin contratiempos, pues este módulo presentó baja afluencia y atención ágil por parte del personal de salud, por lo que Julio César pudo retomar rápidamente su jornada laboral.
No tuve tiempo cuando nos tocó a los de mi edad, me tocó andar fuera trabajando, por eso vine hoy que sí pude, soy albañil y chofer, por eso luego me ocupo”, refirió.
Julio César comentó que aunque han pasado más de dos años, mucha gente sigue sin creer en la existencia de la enfermedad COVID-19, por lo que rechazan la vacuna al pensar que no sirve de nada.
Sin embargo, consideró que es importante que las personas se vacunen, pues es parte de la responsabilidad que deben tener los ciudadanos para evitar nuevas olas de contagio.
Pienso que está bien, para protegernos de la enfermedad que está, mucha gente no cree y ya cuando están enfermos ya la quieren”, enfatizó.
El irapuatense indicó que tener la dosis de refuerzo lo hace sentirse tranquilo, pues por su trabajo se relaciona con mucha gente y viaja a diferentes ciudades, además de que no quiere poner en riesgo la salud de su familia.
Ya todos estamos vacunados, por eso le digo a la gente que vengan a vacunarse, para cuidarnos todos, protegernos unos con los otros, al rato unos la llevamos por otros”, finalizó.