Irapuato, Guanajuato.- Para la familia de Daniela Alejandra Ordaz Silva, de 14 años, este 14 de febrero fue día de fiesta, luego de que la menor tocara “la campana de la vida” .

Esta es una tradición en algunos hospitales y significa que una persona ha conseguido finalizar con éxito su tratamiento

Es una cosa muy padre, había ocasiones que se me ponía muy mala, yo le pedía mucho a Dios que la curara, y es muy bonito todo esto que estamos viviendo, vale la pena la lucha, todas las ganas que como familia le pusimos para sobrellevar esta enfermedad”, refirió Maricela Silva, mamá de la adolescente.

Durante la conmemoración del Día Internacional del Cáncer Infantil, la señora compartió que a los 5 años de edad, Daniela Alejandra empezó con sangrado, a cansarse muy rápido y presentaba muchos moretones.

Recurrimos a un hospital particular, después de ahí el doctor nos mandó al Hospital General y la verdad luego luego me la atendieron, después de varios estudios, análisis, nos  dieron el diagnóstico, ella tuvo Leucemia Linfoblástica Aguda”, recordó.

“En ocasiones si no estaba bien debido a que las defensas estaban muy bajas, nos íbamos atrasando un poco y era nuestro miedo que la leucemia pudiera progresar rápidamente”, añadió.

La señora Maricela contó que tuvo mucho miedo de perder a su hija. Foto: Melba Vidales

Confesó que como madre tuvo mucho miedo de perder a su hija, al desconocer la enfermedad; sin embargo, recalcó que el “cáncer es curable si se detecta a tiempo” y el escuchar el sonido de la campana es un acto de esperanza y apoyo a todas las familias que siguen luchando contra esta enfermedad.

“Es muy difícil, uno no lo asimila, pero con la ayuda de Dios todo se puede, decirles a los padres de familia que cuando vean algo diferente en sus hijos hagan caso, es muy importante detectar a tiempo cualquier enfermedad, no lo dejen pasar, el cáncer es curable si se detecta a tiempo y cualquier síntoma que vean, acudan al doctor”, señaló la señora Maricela.

Explicó que tuvieron acompañamiento de doctores y psicólogos, y su hija siempre estuvo enterada de lo que tenía.

A ella nunca se le oculto nada, siempre el doctor nos dijo que ellos debían saber todo el proceso por lo que ellos iban a pastar y que ella tenía que estar consciente de todo su tratamiento”, contó.

A pesar de ello, este martes 14 de febrero la familia escuchó el mejor sonido para expresar su alegría y felicidad de haber superado el cáncer.

mvidales@am.com.mx

DAR

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