Irapuato, Guanajuato.- Las cámaras de la sede del Sistema de Seguridad Pública de Romita grabaron cuando Daniela Castro, Juan Pablo Vargas y Carlos Rocha fueron entregados a un grupo armado por el director de la Policía Municipal, su escolta y el policía a cargo de los separos.
Los videos captaron también el momento en que las víctimas fueron sometidas y atadas por el jefe policial y sus dos subordinados, pudo saberse hoy en la audiencia inicial del proceso contra los tres agentes.
El procedimiento comenzó en una de las salas del Poder Judicial de Irapuato, a las 9:30 de la mañana, se desarrolló por videoconferencia y quedó asentado en la causa penal P3723 24.
Roberto “L”, de 43 años, director de Seguridad Pública; su escolta, Roberto Carlos, de 32 años y César “G”, de 45 años, son acusados por desaparición forzada.
No se les ha podido comprobar el delito de homicidio, a pesar de que al final los tres jóvenes fueron asesinados y sepultados en un terreno de la comunidad El Escoplo, de Romita.
Durante la audiencia se supo que el domingo 19 de febrero las tres víctimas: Daniela Castro Palacios, de 24 años, su esposo Juan Pablo Vargas, de 28 y Carlos Rocha Anguiano, estuvieron involucrados en un accidente, luego de que con el automóvil Jetta en que iban, se estrellaron contra otro coche estacionado.
La representación de la Fiscalía detalló que Juan Pablo conducía con aliento alcohólico y presuntamente dijo pertenecer a un grupo de la delincuencia organizada, por lo que fue detenido.
Un elemento de Tránsito intentó documentar el accidente, levantar la boleta de infracción, remitir al conductor responsable del choque y poner a disposición de la autoridad correspondiente los vehículos involucrados.
Pero al lugar llegó el director de Seguridad Pública de Romita e impidió la tarea del agente, ya que junto con su escolta, tomaron el control de la situación, llevaron a Juan Pablo a los separos y ordenaron al agente de tránsito trasladar su coche a la dirección de Seguridad Pública y no al corralón, como correspondía.
Aplazan la audiencia
De acuerdo a las versiones surgidas durante la investigación, se supo que Juan Pablo había sido amenazado 15 días antes de los hechos por el director de Seguridad Pública, al parecer por rencillas que existían entre ambos, aunque no se conocieron detalles sobre los motivos.
Además los dueños del otro vehículo involucrado en el choque, dijeron haber escuchado que cuando sometían y se llevaban al detenido, le decían: “Ya te habíamos dicho que te fueras de Romita o te vamos a desaparecer”.
De acuerdo con lo que se escuchó en la audiencia, el día de los hechos Daniela y Carlos acudieron a pagar la multa para sacar de la cárcel a su esposo y amigo, pero les dijeron que no se encontraba en la sede de seguridad. Ante su insistencia por saber de su amigo, fueron retenidos contra su voluntad.
En la audiencia se relató también que a las 11:04 de la noche de ese día, las cámaras conectadas captaron el momento en que Daniela, Juan Pablo y Carlos fueron atados de manos y entregados a cuatro presuntos integrantes de la delincuencia organizada, quienes se los llevaron a bordo de una camioneta.
La tarde del 23 de febrero la Policía localizó una fosa clandestina en la comunidad Escoplo, cerca del relleno sanitario, en donde fueron hallados los cadáveres de los tres jóvenes.
El 28 de febrero la Fiscalía General del Estado de Guanajuato dio a conocer la detención de tres elementos de la Policía de Romita por su presunta responsabilidad en la desaparición y asesinato de los tres jóvenes, entre ellos, el director de la Policía de Romita.
Cuatro horas después del inicio de la audiencia, la defensa de los acusados solicitó duplicidad del término constitucional para allegarse pruebas a su favor.
El juez de control aceptó y tendrán 144 horas para presentar más evidencias.
Será el próximo lunes 6 de marzo a las 9 de la mañana, en audiencia presencial, que se reanude la audiencia inicial y se determine si el jefe policial y sus dos subordinados son o no vinculados a proceso penal.
AM
