Irapuato, Guanajuato.- A un año del homicidio de Ángel Yael Ignacio Rangel, estudiante de la Universidad de Guanajuato, asesinado por un elemento de la Guardia Nacional, aún no ha tenido justicia, pues la próxima audiencia se realizará hasta agosto.
La tarde 27 de abril del 2022, elementos de la Guardia Nacional persiguieron a Ángel Yael, Edith y dos compañeros más por la comunidad ‘El Copal’, luego de que les marcaran el alto y estos no se detuvieran por lo cual les dispararon, hiriendo de gravedad a Edith Alejandra y dejando sin vida a Ángel Yael.
Hecho que desató la indignación de la comunidad universitaria y por lo que pidieron justicia en diferentes manifestaciones en Irapuato y en Guanajuato capital donde se encuentra la sede principal de la universidad.
En su momento se había dicho que un elemento de la Guardia Nacional era el culpable, sin embargo, hasta el momento se encuentran dos detenidos y en espera del juicio.
Pablo González Sierra, profesor de la Universidad de Guanajuato y asesor Jurídico de las Víctimas del Delito, comentó que el proceso lleva una serie de pasos que implican tiempo, pero el asunto jurídico se inició desde el 27 de de abril del 2022, fecha que toda la comunidad universitaria recuerda por el doloroso homicidio del joven.
“En estos momentos el proceso ha ido avanzando, el próximo 1 y 2 de agosto del 2023 se va a celebrar una audiencia que se llama audiencia intermedia, en donde las partes presentamos nuestras pruebas para que luego se lleve el juicio de forma posterior en otra audiencia”, dijo.
Señaló que no saben cuánto tiempo se llevará el juicio oral en el que se deslinden las responsabilidades de las dos personas que están señaladas como acusados.
“Al principio se hablaba de una sola (persona acusada), de un solo tirador y que de forma posterior el informe pericial, la información científica nos relevó que fueron dos tiradores, dos personas diferentes, dos armas diferentes y ese segundo tirador que desde el primer momento no estaba detenido, fue la persona que acabó, que terminó con la vida del joven universitario Ángel Yael”, mencionó sobre la información que se sabe de los acusados.
Explicó que el proceso se ha visto muy lento ya que los casos que lleva el Poder Judicial de la Federación se han retrasado las audiencias y esto ocurre desde la pandemia.
“A las autoridades judiciales les estamos pidiendo como dicen los padres del joven universitario de Ángel, les estamos pidiendo justicia, justicia que desde nuestra perspectiva es la declaración de culpables de las personas que de forma artera, dolosa, sin fundamento realizaron disparos en contra de aquella camioneta en la que iban 4 estudiantes de la Universidad de Guanajuato”, agregó.
Consideró que con las pruebas que van a presentar y las que llevará el Ministerio Público Federal son suficientes para convencer al juez de que los acusados son culpables.
Cabe señalar que durante el ataque a la camioneta Ángel Yael viajaba con tres compañeros, entre ellos Edith, también estudiante de la misma institución, quien resultó herida de gravedad por un disparo, por lo que los procesos penales en contra de los dos acusados se están llevando en conjunto, a pesar de que las causas penales son diferentes.
En realidad van juntos, van unidos y yo estimo que lo más probable es que habrá solo un juicio oral en contra de dos acusados, en agravio de cuatro personas, que son los que iban en esa camioneta”, indicó.
Amigos recuerdan a Ángel Yael como una persona feliz
“Era muy sonriente, muy divertido, era muy elocuente, muy agradable” es como recuerda Jared Misael, compañero de la escuela y amigo de Ángel.
El también estudiante mencionó que Ángel era una persona que siempre estaba contento y era alguien que siempre se acoplaban a los demás, por lo que lo recuerda como alguien sonriente y divertido, además de siempre apoyar a las personas.
En ese momento y ahorita todavía me sigue doliendo (su pérdida) pero si fue muy complicado, porque no sabes en qué momento se pueda ir alguien de tus amigos”, dijo.
Refirió que él recibió la noticia del homicidio de Ángel en la escuela, pues se encontraba aún en clase, por lo que fue una sorpresa grande para todos.
“Supongo que para mí y para otros fue algo shockeante, porque tristemente pasa más que un delincuente te haga eso (dispare) no alguien que te tiene que cuidar, fue muy complicado”, dijo.
El universitario explicó que asimilar lo ocurrido con Ángel fue muy complicado para los que eran más cercanos a él, pues no podían creer que las autoridades que son los que cuidan a las personas hayan realizado disparos a los estudiantes.
La Guardia Nacional ya no pasa en la comunidad
Luego de lo ocurrido con el estudiante, la Guardia Nacional ha delimitado sus rondines en la comunidad ‘El Copal’, pues la presencia de estos cada vez ha sido menos, mencionó Perla Jazmín Murillo, delegada de la comunidad.
Expresó que no sabe cómo se está trabajando con la Guardia Nacional, pues tres meses después del homicidio de Ángel estos dejaron de realizar patrullajes en la zona.
“Ya no entran casi a la comunidad. Después del homicidio ya no entran a la comunidad y si lo hacen nada más es de paso. Ni siquiera se paran (…) tardaron tres meses (en dejar de pasar) si era muy recurrente el patrullaje y la visita, después de tres meses ya no volvieron a pasar”, indicó.
Dijo que ha habido menos seguridad ya que las patrullas municipales dan rondines muy alejados y no tienen una buena respuesta cuando piden unidades al 911.
Además de que los estudiantes han seguido con sus festejos sin control, pero cree que esto se debe a que las autoridades municipales no hacen su tarea de fiscalizar la venta de alcohol la cual se ha hecho un gran problema pues hay lugares de venta clandestina.
AGM