Irapuato, Guanajuato.- El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, reconoció la dificultad de evaluar el desempeño del fiscal Carlos Zamarripa Aguirre en medio de la actual situación de violencia en el País. 

Ayer, el periódico AM publicó una entrevista con el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, en la cual defendió la labor del Fiscal.

Me pones muy poquito difícil juzgar el trabajo de una persona, yo lo que puedo decir es que la violencia y el crimen están incontrolables, no solo en el estado, sino en muchos lados”, dijo.

Monseñor destacó la necesidad de considerar la amplitud de la violencia en el País, al hacer hincapié en que, si bien en Celaya se han registrado asesinatos de policías, otras regiones como Acapulco, Taxco y Zihuatanejo también han vivido episodios de violencia.

“La preocupación es que el crimen en determinados momentos vaya superando a las autoridades y que lejos de estarnos echando culpas unos a otros, necesitamos unirnos para seguir trabajando, no sabría evaluar el trabajo ya en concreto de Zamarripa”, dijo.

Enrique Díaz espera que trabajo de Zamarripa sea evaluado de forma exhaustiva

No obstante, el líder religioso expresó su esperanza de que el trabajo del Fiscal sea evaluado de manera exhaustiva, especialmente ahora que se acercan las elecciones.

Asimismo, resaltó la importancia de que la ciudadanía participe activamente en este proceso, ya que son testigos directos de la labor del funcionario.

“La realidad del crimen en nuestro estado y nuestro País sigue muy fuerte, es una realidad”, indicó.

Díaz Díaz señaló con preocupación que la violencia ha alcanzado niveles alarmantes en diversos aspectos. A modo de ejemplo, mencionó el desplazamiento de comunidades enteras en Chiapas, donde los habitantes se vieron obligados a abandonar sus hogares debido a la amenaza del crimen.

“Aquí no hemos visto que cobren (piso), pero hemos visto muchas personas que han tenido que salir del estado porque le tienen miedo al crimen, yo te puedo decir de familias que han abandonado nuestro estado por miedo al crimen”, refirió.

El religioso lamentó la triste realidad de que la violencia esté afectando a los niños, subrayando al mismo tiempo que la sociedad no debería acostumbrarse a situaciones como niños baleados.

“Es algo que nos duele, que los niños puedan realizarse y que los niños tengan que sufrir tanta violencia, no podemos acostumbrarnos”, indicó.

DAR

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