Irapuato.- Entre bronca, expulsiones y violencia verbal de los aficionados de los Freseros de Irapuato al cuerpo arbitral y a los jugadores del club Aguacateros de Peribán, un partido aguerrido fue lo que dejó el enfrentamiento en el Sergio León Chávez entre líder y sublíder del grupo B de la Liga Premier.

El juego entre ambas escuadras se tornó muy aguerrido en el medio campo, pues el Irapuato se adelantó al minuto 13 del primer tiempo, cuando un pase vertical encontró a Pablo Rangel en el área y sin dejar botar la esférica, el jugador impactó con pierna derecha para batir la puerta del conjunto visitante.

Después del gol, el equipo de Irapuato renunció a buscar el segundo de manera inmediata, por lo cual, los futbolistas de Aguacateros se fueron con todo su arsenal al frente, aunque sin ocasionar peligro a la puerta fresera.

Por su parte, Club Irapuato buscaba un error del equipo visitante para tener un contragolpe e incrementar el marcador, situación que no sucedió.

Los últimos minutos del primer tiempo fueron de un Peribán que intentaba llegar a la portería fresera sin conseguirlo, y lo más destacado fue a cargo de los azulgranas al minuto 30; tras una serie de rebotes, el balón quedó en los pies de Pablo Rangel, pero su tiro se fue desviado de la portería de los de Peribán.

El segundo tiempo comenzó de la misma forma que culminó el primero, con los Freseros de Irapuato a la espera de un contragolpe, mientras los Aguacateros en su intención de obtener el gol del empate.

La mala suerte persiguió a los de Peribán, pues el número 7, Jovani Huerta, desbordó en el área de la Trinca, y quedó frente al arquero, pero con su disparo, el balón salió apenas desviado de la portería.

Con el líder y sublíder del grupo B de la Liga Premier, donde tan solo dos puntos era la diferencia, las expectativas de un juego con goles y vistoso entre la Trinca Fresera contra Aguacateros de Peribán eran grandes.

Sin embargo, el ímpetu de los de Peribán, dio su recompensa al minuto 43 de la segunda parte, pues el árbitro concedió una pena máxima, después de que el delantero David García de los Aguacateros recibiera una falta dentro del área de la Trinca.

La pena máxima fue cobrada por el mismo García, quien engañó al arquero para dejar el balón por el lado izquierdo de la portería, mientras el arquero fresero se fue hacia el otro costado.

Sin embargo, lo negro de la noche, fue la actitud de los aficionados que se encontraban atrás de las bancas de los equipos, en la zona conocida como la ‘Puerta 7’. Desde el minuto 30 comenzaron algunos aficionados a agredir verbalmente al cuerpo técnico de los Aguacateros de Peribán y al momento de marcarse el penal en favor del equipo visitante, ante la alegría de los jugadores en la banca de Peribán, los aficionados freseros comenzaron a aventar vasos contra ellos.

Al igual durante el festejo por el gol que les daba el empate, una persona del staff del club Irapuato se hizo de palabras con el delantero David García, y este lo empujó y tumbó al suelo, razón por la cual se fue expulsado.

Esta situación provocó un conato de pelea entre ambas escuadras, donde al final el árbitro central determinó expulsar a otro jugador de Peribán y uno de la Trinca Fresera por estos disturbios.

Una vez terminado el partido, la Policía Municipal de Irapuato, tuvo que proteger tanto a los jugadores de los Aguacateros, como al cuerpo arbitral para que salieran seguros del campo de juego.

Con este empate a un gol por bando, la Trinca Fresera continúa como líder del grupo B de la Liga Premier, seguido de los Aguacateros de Peribán, pero la afición no demostró un buen comportamiento con los jugadores rivales y el cuerpo arbitral, y esto empañó este encuentro. 

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