Irapuato, Guanajuato.- Tres hombres y una mujer, con el rostro cubierto con pasamontañas y sujetando armas largas, ingresaron con violencia a un anexo para exigirles desalojar.
Les daban tan solo una hora para abandonar el lugar; de lo contrario, amenazaron con regresar, atacar el centro de rehabilitación y matar a todos.
Esto sucedió este jueves 5 de diciembre a las 12 del mediodía en el anexo: “Jesús es Mi Paz”, ubicado en el cruce de las calles Sedesol y Luis Donado Colosio, de la colonia Ampliación Bellavista.
El lugar tenía ya tan solo siete internos, mientras que el lugar, como anexo, tenía operando un año.
El dueño del centro de rehabilitación, quien pidió mantener en anonimato su identidad, narró que este jueves desde muy temprano, salió a una reunión en Guanajuato Capital acompañado de tres de los siete internos.
Uno de los cuatro anexados que se quedaron, platicó que al mediodía se retiró el psicólogo y a los pocos minutos llegó el grupo armado.
Haz de cuenta que como estaba el psicólogo, se acababa de retirar, pensamos que se había regresado, porque la camioneta era del mismo color, una camioneta blanca, doble cabina, de caja, con vidrios polarizados, de cuatro puertas.
“En cuanto abrí la puerta me apuntaron con la pistola, me preguntaron que cuánta gente teníamos adentro, le dije que solamente los que estaban ahí, éramos cuatro, y mientras uno me apuntaba, el otro nos estaba tomando fotos”, contó.
Fueron tres hombres y una mujer los que llegaron en la camioneta con armas largas y pasamontañas.
La mujer y uno de los hombres se quedaron afuera resguardando y los otros dos hombres tocaron la puerta, ingresaron a la entrada y encañonaron al interno que abrió, para extender la amenaza.
Me dijeron que me daban una hora para evacuar el lugar, de lo contrario, que iban a regresar y nos iban a matar, pues.”
“Se pasaron dos, la mujer y otro se quedaron afuera. Uno nos apuntó con el arma y el otro se encargó de tomarnos fotos. Nos dijo que de cualquier manera, ya nos tenían ubicados, que iban a regresar a matarnos si miraban gente.”
“Uno era alto y robusto, el otro de complexión y estatura normal, pero fueron los únicos que alcancé a ver bien”, agregó el joven interno.
Al retirarse volvieron a abordar la camioneta y escaparon por varias calles de la zona alta del cerro de Arandas, rumbo a la colonia Los Cobos.
El dueño del anexo platicó que nunca tuvo amenazas previas, ni por teléfono, mensajes, ni personalmente.
No los golpearon, pero los amenazaron, le doy gracias a Dios que no les hicieron nada; pero pues no me queda más que cerrar un tiempo, entregarlos (a los internos) a sus familias, y buscar mi seguridad”, manifestó.
Al lugar llegó una patrulla con dos policías municipales, tomaron por escrito el reporte y se fueron.
Protestaron en el Congreso
Justamente, un grupo integrado por mujeres y hombres, provenientes de diversos anexos del estado, protestaron en el Congreso Local por mayor seguridad y mejor regulación para estos centros de rehabilitación.
Descartan amenazas en anexo
La Secretaria de Seguridad Ciudadana de Irapuato compartió su postura respecto a las amenazas de un grupo armado a un anexo ubicado en la colonia ampliación Bellavista.
En dicho informe, que compartieron a través de sus redes sociales, la Secretaría informa que elementos de la corporación municipal se trasladaron al lugar para hablar con el personal del lugar.
De acuerdo a su versión, el dueño del lugar informó que se encontraban laborando con normalidad, aún así, unidades de la Policía Municipal realizaron rondines y resguardo en la zona de manera permanente.
AAK