Vandalizada, en el olvido se encuentra la Placita de las Vigas en San Juan de Dios, que fue remodelada en la pasada administración de Héctor López Santillana, con una inversión de 6.6 millones de pesos.
El proyecto que inició el 26 de abril del 2019 contemplaba que se denominara “Placita Turística y Comercial de Las Vigas” y ahí reubicarían a todos los comerciantes ambulantes que actualmente siguen en las inmediaciones del Jardín de San Juan del Dios.
El proyecto contempló una estructura de diseño contemporáneo con techo de cristal antivandálico, película adicional, y un 95% de rayos ultravioleta de colores.
“La remodelación tardó más de seis meses contemplados por Obra Pública y luego vino la pandemia y todo ha quedado en buenas intenciones”, dice José Manuel Espinosa, vecino del lugar.
El alcalde López Santillana, quien puso en marcha las obras, dijo en su momento: “No queremos hacer espacios bonitos y que estén muertos, queremos que estén vivos y que impacten”.
En la actualidad las pequeñas jardineras están con plantas muertas, sin atención; la estructura vandalizada; los techos con vidrios antivandalicos, sin mantenimiento alguno.
“De noche se ve bonito por las luces ultravioleta, pero los comerciantes nunca se han querido venir para esta zona, prefieren estar en la zona del Jardín; además que en esta zona no hay donde estacionarse porque colinda con el bulevar Mariano escobedo”, dice Antonia García, quien tiene un negocio de pan en la zona.
El rescate de la Placita de las Vigas, que durante años, fue el punto de reunión de “maistros” albañiles y chalanes que iban en busca de chamba y a los cuales se les reubicó,
En Obra Pública se informó que la obra fue entregada y que ahora la reubicación de comerciantes correspondía a la Dirección de Comercio y Consumo. Se buscó al titular, Mauricio Fuentes, quien no ha dado una respuesta al rescate de este punto, pues se argumenta que no pueden hablar por veda electoral.
La Placita de las Vigas es una plazoleta que data del año de 1906, que inicialmente era llamada Plaza de Los Merenderos, y donde se localizaba el Mesón de San Cayetano.