León, Guanajuato.- Originarios de la Ciudad de México, de la Zona Centro, Morelos y Tepito, la familia Vallejo Guzmán, salió desde temprano para llevar comida a los peregrinos que llegan a León.
Cerca del estadio, año con año se colocan ahí para darles un plato de alimento y agua a todos los que van a San Juan de los Lagos.
“Ya tenemos muchos años, de hecho la pionera era mi mamá, este punto lo decidió porque era donde pasaban todas las peregrinaciones, o tenían que comer aquí y ella decidió y prometió que vendría.
La verdad nunca supe por qué lo prometió pero es la tradición que estamos siguiendo, ella ya no está pero tratamos de hacerlo para continuar su legado”, dijo María del Carmen Vallejo Guzmán mientras calentaba la comida.
Carmen y su familia se ponen afuera del estadio, los peregrinos ya los ubican y llegan a pedir comida y “recargar pilas” para seguir en el camino que los llevará a San Juan de los Lagos.
“Normalmente nos ponemos ahí en el estadio, hoy no nos apoyaron, no nos dejaron, pero nos encontramos a un corazón blando y nos dejó aunque sea en una orilla para hacer la labor y aquí estamos”, dijo.
El menú fue pollo en salsa verde con papas, arroz, refresco y tortillas. Desconocen a cuántos les dan comida pero a todos los que se acercan les tratan de dar un plato completo.
“Solo venimos un día, nosotros que venimos a dar la providencia salimos de allá”, dijo María del Carmen.
Fueron 70 kilos de pollo, dos cazuelas de arroz y tortillas, todo eso caliente, ya que ellos llevan su tanque de gas y donde se instalan ponen su parrilla para hacer todo.
Juana Guzmán fue la fundadora de ofrecer la comida a todos los que viajan para ver a la Virgen de San Juan de los Lagos, hace unos años falleció pero su legado sigue a través de sus hijos y nietos.
AM