León, Guanajuato.- Lizbette Hurtado, la exanalista de compras acusada por el Municipio de León de malas prácticas en un proceso de adjudicación, se defiende.
Afirma que su baja fue de mutuo acuerdo, por despido injustificado.
Y rechaza que fuera despedida por presuntamente exceder sus funciones y asignar un contrato a un proveedor sin autorización, como afirmó el Gobierno Municipal.
“No teníamos acceso a los nombres”, dijo, pues el Sistema de Compras en línea es automatizado.
Agregó que está en la mejor disposición de aportar lo que esté a su alcance, lo que es un convenio y una ratificación de convenio en Conciliación y Arbitraje por despido injustificado.
“Ellos me dijeron ‘no tenemos nada en contra tuya, no hiciste nada, entonces se te va a liquidar al 100%’, perfecto, es lo justo”, dijo.
Lizbette sigue trabajando en la Presidencia, como eventual, en el área de C4, donde presentó toda su documentación, también ante Desarrollo Institucional.
Por eso la tomó por sorpresa el síndico José Arturo Sánchez Castellanos, quien hace dos semanas la buscó y le mostró la presunta acta de hechos por parte de la Dirección de Adquisiciones.
Acta que no está firmada por ella pero tiene la leyenda “Se negó a firmar”.
Tampoco hay firma de testigos, lo que invalidaría el documento.
Lizbette Hurtado afirmó que nunca leyó siquiera esa acta, y que se lo dijo al síndico.
“Municipio de León se está contradiciendo él mismo, así como lanza un comunicado diciendo que se me despidió por esa razón, al mismo tiempo me dan un convenio donde me dicen que me van a liquidar porque no tienen fundamento para despedirme”.
Añadió que por los hechos presentó una queja en la Contraloría, instancia en la que confía para que aclare todo el asunto.
AM