León, Guanajuato.- La Iglesia católica en México lanzó un exhorto para acompañar este domingo a las familias víctimas de la violencia, en particular por las personas desaparecidas y en el templo del Inmaculado Corazón de María se arropó al colectivo Madres Guerreras.
Durante la primera lectura, tomada del libro de Jeremías, se hizo mención a los lamentos de Raquel, quien ha perdido a sus hijos. Pero en la homilía, el sacerdote les cedió el púlpito a las madres buscadoras.
Ahí, ellas pidieron que no se les criminalice, ni a sus desaparecidos, más bien que tengan empatía por la situación que están pasando.
El crimen organizado se está apoderando de nuestro México, de nuestro estado. Nos está arrebatando a nuestros hijos”, dijo Martha, una de las integrantes.
No obstante, agradeció que la Iglesia se esté sumando a su movimiento y al padre Enrique, titular de esa parroquia, por su apoyo espiritual.
Pero además, que con un equipo de tanatólogas, las ayude a llevar su duelo por muerte o desaparición de sus hijos o hijas.
Claudia habló de su hija Ivonne, de 19 años, desaparecida y encontrada después sin vida, gracias a la presión del colectivo.
Ella dijo que permanecerá activa en Madres Guerreras a pesar de ya haber encontrado a su ser querido. “Ayer fue por mi niña y hoy es por alguien más”.
Se cumple aniversario de sacerdotes jesuitas asesinados
Por su parte, el sacerdote hizo un pase de lista con los nombres de varias personas buscadas por el colectivo, que a la fecha suman unos 44 hombres y 6 mujeres.
Esto, en el marco de la conmemoración del primer aniversario del asesinato de dos sacerdotes jesuitas, Javier y Joaquín, en una iglesia de Cerocahui, Chihuahua, en la Sierra Tarahumara.
Unas cien personas entre feligreses y personas buscadoras participaron en la celebración eucarística.
Sonarán campanas por víctimas de violencia
Se informó que el próximo martes 20, a las tres de la tarde, sonarán las campanas de los templos en León y del País en recuerdo de las víctimas de violencia y un clamor de justicia.
Ya en entrevista, la madre de Juan Antonio Villanueva Sánchez explicó que este joven fue detenido por tomar en vía pública el 11 de abril de 2021.
La Policía Municipal afirma que salió por su propio pie del Cepol al día siguiente, pero desde entonces no hay rastro suyo.
La mujer explicó que ella se unió a Madres Guerreras en septiembre, de quienes ha recibido acompañamiento, por lo que colabora en el tejido de las redes que se tendieron en el altar con las decenas de fichas de desaparición.
Otra integrante del grupo comentó que las redes están hechas con rafia sintética roja “como el color de la sangre derramada por todo México”.
Las redes se han vuelto un símbolo y una meta para los colectivos a nivel nacional, que han comenzado a tejer cuadros de 1 x 1 metro, para luego juntarlos en algún acto futuro y así dimensionar la gravedad del fenómeno de las desapariciones.
Añadió que para septiembre se prepara la entrada de varios colectivos a Ceresos en León para la búsqueda en vida, una vez que la Fiscalía General del Estado brinde todos los permisos.
AGM.