León, Guanajuato.- En la Catedral Metropolitana de León serán ordenados 15 diáconos.
“El próximo 15 de agosto nuestra Iglesia diocesana se llenará de alegría con la ordenación diaconal de 15 de nuestros seminaristas”, dio a conocer la Arquidiócesis de León.
De manos del Arzobispo Alfonso Cortés, recibirán el Sagrado Orden del Diaconado en la Catedral Basílica Metropolitana de León.
“Ellos están dispuestos a seguir respondiendo al llamado de Dios y estar al servicio de su Iglesia. A través del diaconado, serán llamados a proclamar la palabra de Dios, asistir en los sacramentos y dedicarse al servicio de los necesitados”, informó la Arquidiócesis.
El Seminario Conciliar de León también dio a conocer la buena noticia de los nuevos diáconos, y agradeció a los bienhechores por el apoyo que se ha dado a la formación de estos futuros sacerdotes.
“Gracias también a todas las personas que oran por las vocaciones y que apoyan a nuestra casa de formación. que el Señor les recompense con abundancia de bendiciones por su generosidad”.
Una vez que reciban la ordenación de diáconos serán asignados a una parroquia como auxiliares de los sacerdotes, pasados unos meses serán ordenados sacerdotes si así lo deciden.
Un diácono puede predicar el Evangelio, bautizar, asistir al sacerdote en el altar, distribuir la comunión, lo único que no puede hacer es el rito de la Consagración.
DE VIVA VOZ:
Mi visión del celibato es una entrega, una donación que uno hace, conscientemente, de la propia vida, de la propia persona a Dios y a su Iglesia”. – Jesús Francisco López Castro, 27 años
Mi experiencia en el Seminario tiene que ver mucho con el descubrimiento de que Dios no elige a los mejores, de que Dios nos elige para ser mejores”. – Zacarías Muñoz Aldape, 39 años
Hace 24 años, con la visita de unos seminaristas que llegaron a mi comunidad de misión. En su momento, me invitaron al Seminario y claro que no hice caso a esa invitación, los juzgué”. – Héctor Alexis Rocha, 27 años
Ha sido una dicha. Fue un momento muy gratificante para mi vida. No vivía con la incertidumbre, pero sí constantemente me preguntaba si esta era mi vocación”. – José Saúl Servín, 25 años
Los 11 años de mi formación en el Seminario han sido una experiencia de camino y crecimiento. Un camino que ha implicado sacrificios, renuncias y cansancios, pero también grandes satisfacciones, logros”. – Gabriel Rodríguez, 31 años
Durante mi infancia me llamaba la atención ayudar al sacerdote en la Misa, y fue hasta el año 2008, a los 11 años, cuando ingresé al grupo de monaguillos de mi parroquia”. – Diego Francisco Estrada, 26 años
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