El parche de fentanilo se coloca directamente sobre la piel y el medicamento se absorbe en el torrente sanguíneo; especialistas lo recetan para el tratamiento del dolor y se considera un analgésico de acción prolongada

León, Guanajuato.- Por un presunto caso de tráfico de parches de fentanilo, el Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío (HRAEB) inició una investigación

En entrevista con AM, el doctor Juan Luis Mosqueda Gómez, director del Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío, confirmó el inicio del proceso. 

Los medicamentos controlados, como los parches de fentanilo, se prescriben bajo un recetario especial con código QR, además se registra en bitácoras cuándo y a quién son entregados o suministrados

AM tuvo conocimiento de que el familiar de una mujer adicta denunció el presunto tráfico de parches de fentanilo. Dijo a las autoridades del hospital que un médico le entregaba parches sin requerirlos y sin ser paciente de esta unidad médica. 

La mujer, plenamente identificada por AM, señaló que los parches los sustrajo del hospital uno de los directivos médicos cuyo nombre se reserva.

El doctor Mosqueda Gómez informó que el pasado miércoles el familiar se reunió con el titular del Órgano Interno de Control del Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío, para aportar las pruebas de la acusación. 

Ya había dado la instrucción para que se diera vista precisamente al Órgano Interno de Control y se iniciara una investigación. No ha habido ninguna otra denuncia similar. Tomamos muy en serio una denuncia y me parece importante que se desarrolle la investigación, pero yo no asumiría que eso ocurra. 

“Cada medicamento tiene una trazabilidad para saber quién lo prescribe, quién lo recibe. Es un cuidado muy extremo de todos esos medicamentos”, reiteró. 

Al preguntarle cuándo pudiera haber alguna resolución o los resultados de esta investigación, afirmó que solo el Órgano Interno de Control que depende de la Secretaría de la Función Pública, pudiera decir en cuánto tiempo. 

El funcionario consideró que esto no debe inquietar a los usuarios de la institución y tampoco impacta en la atención a los pacientes.

“Soy muy respetuoso del equipo con el que trabajo y evidentemente respeto el derecho a aportar las pruebas, pero por otro lado también tomo con mucha seriedad una denuncia como esta y por eso pedí que se inicie la investigación. 

“Como institución a nosotros nos toca aportar la información necesaria a la Secretaría de la Función Pública para que desarrolle la investigación”, concluyó el doctor Mosqueda Gómez.  

La denuncia por el presunto tráfico de parches de fentanilo

La familiar de la persona que presuntamente recibía los parches de fentanilo del directivo médico descubrió al “proveedor” en el teléfono celular de la paciente.

Nos dimos cuenta quién le estaba dando los parches”, dijo.

Recordó que hace dos años fue diagnosticada con cáncer de útero y operada en un hospital particular, posteriormente se le recetaron parches de fentanilo y otros medicamentos derivados de opiáceos

Cuando supera la cirugía, un médico los retiró, pero como el fentanilo es sumamente adictivo al parecer siguió con los parches. En enero tuvo una sobredosis, la internaron en el Issste porque fue lo más cercano. 

Entre enero y marzo de este año tuvo dos sobredosis y en marzo fue cuando tuvimos acceso a su celular para investigar de dónde estaba obteniendo los parches”, contó. 

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AM

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