León, Guanajuato.- Tras las denuncias públicas de trabajadores de la fábrica de calzado Arenix, quienes afirmaron que se les adeudaban salarios y liquidaciones, la Subsecretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) acudió a la empresa para llevar a cabo una inspección de trabajo este sábado.
El número total de afectados asciende a aproximadamente 80 empleados, quienes han estado en la incertidumbre desde hace una semana, cuando se les negó el pago correspondiente a la última semana laborada y se les despidió sin explicaciones.
Ante esta situación, dos funcionarias de la dependencia perteneciente a la Secretaría de Gobierno acudieron a la fábrica para hacer una inspección extraordinaria con el número de orden 2798/2023.
Sin embargo, no fueron recibidas ni se les permitió acceder a la documentación que se les iba a entregar, a pesar de que había personal presente en las instalaciones.
Según el acta dejada por las inspectoras estatales, esta visita se llevó a cabo debido a la difusión de la denuncia de los afectados a través del periódico AM.
Una de las inspectoras explicó: “Venimos a realizar una inspección laboral para verificar las condiciones de los trabajadores que se desempeñan dentro de esta empresa, checar sus condiciones, su salario, su antigüedad, su aguinaldo, todas sus prestaciones, aparentemente se les está violentando”.
Además, señaló que esta acción fortalecerá el juicio laboral que emprenderán los afectados con respecto a sus demandas. Asimismo, enfatizó que la negativa de atender la inspección podría hacer que los dueños de la fábrica enfrenten una multa de 250 a 5 mil veces la Unidad de Medida y Actualización, que equivale a 103.74 pesos diarios.
En las instalaciones de la fábrica, se observó que se bloquearon los accesos con mobiliario para evitar la visibilidad desde el exterior.
José Francisco Montenegro Ortega, uno de los representantes de los afectados, compartió que se les informó a través de un contacto con un representante de la fábrica que se retiró maquinaria y mobiliario debido a un embargo.
“Están diciendo que nos van a poner una demanda a nosotros porque los estamos difamando, cuando simplemente lo que queremos es que nos paguen y si nos van a liquidar, que nos liquiden como es. Y ahora salieron con el pretexto de que es un embargo. No vinieron actuarios, nada más vino un tráiler y una grúa a sacar las cosas. Que yo sepa, un embargo no procede así”, compartió José Francisco.
Finalmente, los trabajadores decidieron mantenerse atentos a los acontecimientos en las instalaciones y seguir el proceso legal correspondiente.
LALC