León, Guanajuato.- “Ay madre, la quiero mucho”, fue el último mensaje que el joven Óscar Gael Méndez Cardona le envió a su mamá la madrugada del pasado 3 de abril.
Desde ese día ni ella ni sus familiares han sabido del paradero de Gael, quien está en calidad de desaparecido, al igual que su amigo Juan de Dios Sánchez Conde.
Gael y Juan de Dios, a decir de sus familiares, eran muy buenos amigos y siempre andaban juntos, e incluso contaron que Gael era como una especie de protector de Juan de Dios quien, dijeron, tiene discapacidad tanto intelectual como motriz.
Familiares platicaron que Gael, quien también tiene un problema leve de discapacidad intelectual, salió de su domicilio el 2 de abril poco antes de las 9 de la noche y en las cámaras de su domicilio se observa que salió con una mochila y un conocido llegó por él.
“Gael tiene un corazón de pollo”, dijo su familiar y aseguró que tiene un historial limpio, cero detenciones.
Afirmaron que nunca faltaba a dormir a su hogar y que máximo llegaba entre 12 y 12:30 cuando salía a alguna fiesta y se reportaba en todo momento.
La madrugada del 3 de abril, a la 1:11 am, su mamá preocupada envió un mensaje de WhatsApp a Gael para preguntarle dónde estaba y el joven de 20 años de edad respondió todavía: “ahorita le digo, ando bien” .
Su madre le dijo “hijo ya es la 1” y este respondió “ya sé mamá”. “Te voy a esperar, ¿ok?”. Gael le mandó el mensaje “Ay madre, la quiero mucho”. Ella le dijo “y yo a ti, hijo, eres mi vida, tú y tus hermanos”.
Gael envió un “sticker” a la 1:13 a.m. y desde esa hora no le volvieron a entrar ni mensajes ni llamadas, a la fecha su línea está apagada.
Su familia preocupada comenzó a preguntar a sus conocidos, uno de ellos fue la persona que se ve en el video que llegó a su casa por él, pero “nadie sabía nada”.
Al preguntar a familiares de Juan De Dios, comentaron que tenía una cita de trabajo en Guadalajara y que pidió le prepararan tres “mudas de ropa”, porque allá le enseñarían a reparar máquinas.
Al ir a levantar una denuncia por estos hechos el 4 de abril a la Fiscalía General del Estado, familiares platicaron que dos personas cercanas dijeron que sabían algo sobre el caso, que había unas fotos en la Central Camionera. Se lo comentaron a los agentes para que se hicieran las investigaciones con la esperanza de que hubiera una pronta movilización, pero no fue así.
Incluso señalaron que en la Fiscalía le hicieron comentarios revictimizantes, como “su hijo ya está grande”, “ay señora, su hijo se fue a buscar mejor vida” y por ello y más omisiones interpusieron una queja en la Procuraduría de Derechos Humanos del Estado de Guanajuato, la cual quedó asentada en la carpeta 0507/2024.
En esta misma queja denunciaron la falta de apoyo y atención de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas de Guanajuato por acciones como decirle a los familiares que ellos tenían que llamar a la Comisión de Búsqueda de Jalisco, “cuando llamé me dijeron que así no era el proceso, que era la comisión estatal (de Guanajuato) la que tendría que hacerlo”, dijo un familiar.
Pusimos la queja en contra de las autoridades, de la Comisión Estatal y de la Fiscalía. Desde un inicio en que la Fiscalía tenía ya los indicios de las fotografías donde ellos se encontraban en la central camionera, nosotros les dimos las imágenes, chats, les dimos la mayor información y ellos se sentaron”, dijo un familiar.
Y agregaron que la única ayuda que han recibido de manera oportuna ha sido del municipio de León, de la Célula Municipal de Búsqueda, de la Plataforma por la Paz y que incluso su caso ya llegó a la Organización de las Naciones Unidas.
Familiares destrozados siguen con la esperanza de que los jóvenes vuelvan a casa y dijeron que los seguirán buscando a pesar de que han recibido extorsiones, llamadas con falsa información y mensajes criminalizándolos o juzgándolos.
Incluso dijeron que por su cuenta han ido a buscar a los jóvenes a donde de manera anónima les han dicho que los han visto, sin resultado.
Interviene la ONU en desaparición de Óscar Gael y Juan de Dios
El Comité contra la Desaparición Forzada (CED) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aceptó el caso de los jóvenes leoneses Óscar Gael Méndez Cardona y Juan Dios Sánchez Conde como desaparición forzada.
Raymundo Sandoval Bautista, consejero en la Comisión Estatal de Atención Integral a Víctimas (CEAIV) de Guanajuato e integrante de la Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato, explicó que esta aceptación obliga al establecimiento de un plan integral de búsqueda.
Señaló que en el caso de Gael y Juan de Dios “no hay más información respecto a la oferta laboral. Pero lo que habrá que señalar es que sí se establece una posibilidad de una red de explotación laboral Guanajuato-Jalisco a partir de casos concretos”.
No es solo la carpeta de investigación de la Fiscalía de Guanajuato en colaboración con Jalisco, implica la participación de la comisión local de búsqueda de Guanajuato, de Jalisco, la nacional y otras instancias consideradas como autoridades investigadoras”, explicó Raymundo.
DAR