Enseñateatro tiene el objetivo de generar talleres de teatro para personas sordas y oyentes, además de promover la Lengua de Señas a través de diferentes cursos

León, Guanajuato.- La cultura de la inclusión no se basa solo en aprender la Lengua de Señas o poner rampas, hay que entender cómo piensa una persona con discapacidad para poder ofrecerle herramientas que le permitan integrarlos dignamente en la sociedad.

En León son pocos los espacios en donde las personas sordas se pueden desarrollar plenamente, por lo que es necesario que escuelas, trabajos, sociedad en general se interesen genuinamente en la enseñanza de esta lengua, señaló Iván Lozano, director general de grupo Enseñateatro, en entrevista para AM.

Talleres de teatro para personas sordas y oyentes. Foto: Cortesía Iván Lozano.

Iván Lozano habló sobre la importancia que tiene la inclusión de personas sordas en la sociedad a través de la Lengua de Señas Mexicana, ya que les abre caminos y se les facilita la convivencia con el exterior.

Lo que la gente necesita más que aprender y usar el idioma de la Lengua de Señas, es entender el pensamiento de una persona sorda, nosotros le llamamos proceso de pensamiento en imagen que es saber cómo se comunica y entiende el mundo un sordo y cuál es su aprendizaje”, mencionó.

El Día Internacional de las Lenguas de Señas se conmemora este 23 de septiembre proclamado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en noviembre de 2017, mismo año en que comenzó Enseñateatro con el objetivo de generar talleres de teatro para personas sordas y oyentes, además de promover la Lengua de Señas a través de diferentes cursos.

Iván señala que es necesario que las escuelas implementen clases de enseñanza de la lengua, además de que se requiere dignificar el entorno en donde las personas sordas son aceptadas.

“Es muy necesario que se den estas clases porque hay pocos maestros que pueden orientar a las personas sordas a que acudan a lugares especiales donde se les pueda brindar una atención adecuada”, dijo.

“Hay mucha discriminación por parte de las escuelas, los aceptan por verse inclusivos, pero no tienen las herramientas para atender a una persona con cualquier tipo de discapacidad”, agregó.

Cualquier persona oyente que aprenda el lenguaje de señas se vuelve un referente importante para una persona sorda, puesto que las dificultades comunicativas a las que se enfrentan diariamente disminuyen cuando alguien domina esta forma de hablar.

Se tiene que dignificar la Lengua de Señas, hay muchos espacios en donde aceptan a personas de la comunidad, pero no todos tienen el contexto que se requieren para una persona sorda, no basta con solo aceptarlo, hay que preparar el entorno para que esa persona tenga una buena comunicación y una real inclusión”, señaló.

DAR

 

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