León, Guanajuato.- Los feligreses de la parroquia de San Miguel Arcángel vivieron un auténtico domingo de fiesta, dedicado a su Santo Patrono.
El majestuoso templo, con sus 40 metros de ancho y 60 de fondo, además del atrio, estuvo abarrotado por fieles devotos del “Jefe del Ejército Celestial”.
El templo resplandecía con arreglos florales, destacando especialmente los situados en el área del presbiterio y en torno a la imagen de San Miguel Arcángel.
Al finalizar la misa, miles de católicos se acercaron a la imagen para pasar bajo el manto protector del Santo.

Desde antes de las 8 de la mañana, los creyentes comenzaron a llegar al templo.
No obstante, el cierre de la vialidad en la calle paralela a Independencia generó un embotellamiento, convirtiendo las calles en un río de automóviles.
A pesar de la inseguridad que caracteriza algunas de las calles adyacentes, los feligreses dejaron sus vehículos en la zona, guiados por su fe, que superó cualquier temor. Poco a poco, llenaron las cinco naves del esplendoroso templo.
Puntual inicio de la celebración

La misa comenzó puntualmente a las 8:00 de la mañana, como parte de la gran celebración, descrita así por los habitantes del Barrio de San Miguel.
En el evangelio se destacó el poder otorgado por Dios a San Miguel Arcángel y a las criaturas virtuosas, por su obediencia a las leyes divinas.
El párroco José Márquez Márquez presidió la misa, acompañado por los presbíteros Zacarías Muñoz Aldape y Víctor Manuel Mendoza Jiménez.
Durante su homilía, el párroco resaltó la importancia de San Miguel Arcángel, recordando cómo venció a Satanás, arrojándolo a las profundidades de la Tierra y el mar, conocidas como el Infierno.
“¿Quién como Dios?”, preguntó repetidamente el reverendísimo Márquez Márquez, a lo que respondía con fervor: “Solo Él, ¡Dios!, por su infinita piedad, su bondad para perdonar y enmendar el camino de sus hijos. Es un padre único”.
El párroco también habló sobre Cristo y enfatizó que solo a través de Él se pueden alcanzar la verdad, la justicia y la paz. “Es lo que deseamos todos, y solo obedeciendo alcanzaremos esos preciados valores que fortifican el cuerpo y el alma de un buen cristiano”, expresó.
Asimismo, resaltó que Lucifer representa el mal, mientras que Cristo es misericordioso y perdona a todos porque ama a sus hijos, creados a su imagen y semejanza. “Cada uno de nosotros, con buenas obras, podemos ser un ángel”, agregó.
Finalmente, el párroco deseó a los presentes dicha y amor a Cristo, no solo en palabras, sino también a través de acciones que reflejen los principios de Jesús.
Las Mañanitas al Santo Patrono

Al concluir la liturgia, la Banda Inseparable, dirigida por Ángel Muñiz, ingresó al templo y, de manera respetuosa, entonó “Las Mañanitas” en honor a San Miguel Arcángel. Posteriormente, interpretaron una canción sacra y se tomaron una fotografía junto al “Rey del Ejército Celestial”.
La banda fue contratada por Don Gustavo Pérez, devoto del Santo, quien también compuso una canción en honor al barrio de San Miguel.
La Banda Inseparable continuó tocando hasta antes de las 4 de la tarde, momento en que dio inicio la procesión que partió del parque hasta la parroquia.
La banda estaba compuesta por tres trompetas, tres trombones, tres clarinetes, cinco percusionistas y vocalistas, bajo la dirección de Ángel Muñiz.
A las 11 de la mañana, se presentó otra banda, originaria del mismo barrio de San Miguel, conocida como “La Brillosa”, dirigida por el maestro Francisco, que se retiró pasada la medianoche.
Por la noche, la celebración culminó con la quema del tradicional castillo de fuegos artificiales, cerrando así el festejo en honor a San Miguel Arcángel, el protector de los fieles. ¡Gracias a Dios! Y hasta el próximo aniversario.
Así fue el festejo a San Miguel Arcángel. Fotos: Leopoldo Medina Delgado
AAK