México.- La tradición del “Halloween” cada vez toma más fuerza en México, y año con año es más frecuente ver a niños que recorren las calles disfrazados en busca de dulces.
Pues este año un par de pequeños llamaron la atención por la originalidad de sus disfraces, y porque hicieron eco de un evento reciente que marcó a la sociedad mexicana.
Se trata de la captura y la posterior liberación de Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y cuya detención provocó la llamada “Batalla de Culiacán”, en donde elementos de seguridad pública se enfrentaron con narcotraficantes en medio de las calles de Culiacán, Sinaloa.
Pues a pesar de lo trágico de la situación, unos padres creyeron que sería buena idea disfrazar a su pequeño hijo como Ovidio, así que lo vistieron con una camisa clara desabotonada en su parte superior, le pusieron un escapulario y una gorra negra, y le pintaron una barba falsa. Así salió el niño a pedir dulces, y sus fotos rápidamente se hicieron virales en redes sociales.
Los internautas, por su parte, dividieron opiniones, pues mientras unos celebraron la ocurrencia y la originalidad del disfraz, otros señalaron la falta de consciencia de los padres, pues creen que gestos como ese sirven para ensalzar la figura de los narcotraficantes.
Por otro lado, el otro gran implicado en la “Batalla de Culiacán”, el presidente Andrés Manuel López Obrador, también fue elegido como motivo de disfraz, ya que un infante salió a pedir dulces con un pequeño traje color crema, con su banda presidencial, y con el característico pelo blanco del mandatario nacional.