Singapur.- Una pareja de padres de Singapur comenzó su proceso de juicio por haber torturado y asesinado a su hijo de cinco años, y de ser hallados culpables, ambos enfrentarían desde cadena perpetua con azotes hasta pena de muerte.

A pesar de que el fallecimiento del pequeño se dio hace tres años, es apenas ahora cuando la mamá, Azlin Arujunah, y el padre, Ridzuan Mega Abdul Rahman, comenzarán su juicio, luego de haber castigado brutalmente a su hijo hasta causarle la muerte.

Un guardia demuestra con un muñeco como se lleva a cabo la pena de azotes en Singapur. FOTO: Daily Mail

De acuerdo con el reporte del Daily Mail, todo comenzó cuando el pequeño, que había sido dado en adopción en su nacimiento en 2011, les fue devuelto a sus padres biológicos en 2015. Entonces ellos comenzaron a castigarlo y golpearlo con sus puños y con escobas, e inclusive le provocaron cojera debido a que le desalinearon una rótula de la rodilla.

Después los castigos aumentaron en crueldad e intensidad, pues empezaron a quemarlo con cucharas calientes y a dañarlo con pinzas. Finalmente, el 22 de octubre de 2016, y ante la negativa del niño a tomar un baño, los papás lo encerraron en una jaula para gatos y le vaciaron agua hirviendo. Tras este hecho, el niño dejó de moverse, pero los padres no lo llevaron al hospital sino hasta seis horas después.

En el hospital, los doctores no solo descubrieron las quemaduras de segundo y tercer grado en el 75% por ciento de su cuerpo, sino que también hallaron que tenía lesiones en los riñones, deshidratación, fracturas en la nariz, cortes en su rostro y problemas para hablar. El niño apenas y sobrevivió un día en el centro de salud.

 

Esta es la prisión de Changi, donde se llevan a cabo las ejecuciones en Singapur. FOTO: Especial

Debido a que los castigos físicos aún son legales en Singapur, de ser hallados culpables los padres enfrentarán penas que van desde cadena perpetua con azotes periódicos hasta la pena de muerte por la horca.

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