El incremento del tráfico de armas en uno de los países más pobres del mundo tiene presencia hasta con los líderes eclesiásticos. La Policía de Haití detuvo a un sacerdote de la Iglesia Episcopal de la Comunión Anglicana, acusado por tráfico de armas.
Mientras que investigadores federales de Estados Unidos se dicen preocupados por el aumento en la cantidad y el calibre de las armas que están siendo contrabandeadas de Florida hacia la isla.
El padre Frantz Cole fue arrestado la noche del miércoles y se le relaciona con un gran cargamento de armas y municiones que fue incautado a mediados de julio de este año, según reveló la agencia Europa Press.
Fue el portavoz de la Policía Nacional de Haití quien confirmó el arresto del clérigo, quien fue llamado a declarar junto a Jean Mardochée Vil, por la incautación que se realizó en el puerto de La Saline, en Puerto Príncipe.
Haití y la crisis interminable
Haití se encuentra inmerso una vez más en el desgobierno y en un estado de inestabilidad agravado por las secuelas del terremoto de hace un año que dejó más de dos mil muertos, y del asesinato presidente, Jovenel Moise, ejecutado por un grupo de mercenarios colombianos el 7 de julio de 2021.
Desde entonces, la capital, Puerto Príncipe, se encuentra en manos de las bandas criminales, que delinquen a su antojo, cometiendo secuestros, extorsión y asesinatos.
En los primeros nueve meses de 2021 se registraron más de 600 secuestros, casi tres veces más que el mismo periodo de 2020.
Según la ONG Acción contra el Hambre, más de cuatro millones de personas en el país dependen de la asistencia humanitaria para satisfacer sus necesidades básicas.
Salen armas a Haití desde Florida
Bajo ese contexto de ingobernabilidad latente desde hace meses, investigadores de Estados Unidos alertaron del aumento en la cantidad y calibre de armas contrabandeadas de Florida a Haití.
Anthony Salisbury, director de la oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional en Miami, dijo que sus agentes están redoblando sus labores para detener el contrabando, y resaltó el aumento en la violencia de las pandillas en torno a la capital de Haití.
Salisbury señaló que entre las armas incautadas hay un fusil calibre .50 que es utilizado por francotiradores militares y otras ametralladoras que no se ven con frecuencia. Los agentes han notado un incremento en el calibre y el volumen de las armas.
“Es sumamente perturbador”, declaró Salisbury a The Associated Press.
En las manos equivocadas, estas armas son capaces de causar una enorme destrucción”.
En julio, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó de manera unánime una resolución que renueva la autoridad de la oficina de la ONU en Haití y exhorta a todos los países a poner fin al envío de armas pequeñas y municiones que podrían estar azuzando la violencia de las pandillas.
La oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional señaló que sigue investigando los motivos del incremento.
Pero la guerra entre pandillas se ha intensificado en las últimas semanas, en las que un grupo delictivo incendió una iglesia y un tribunal, entre otros incidentes.
(Con información de AP y Europa Press).
HEP
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