Ciudad de Guatemala.- La fiscalía guatemalteca incauta 1.222 piezas arqueológicas en la casa de dos estadounidenses procesados por el delito de atentado contra el patrimonio natural y cultural. La pareja de aficionados al arte maya detenida días atrás es ahora investigada por una presunta red dedicada al tráfico ilícito de bienes culturales.
“Con los hallazgos y capturas hechos hasta el momento, se da un duro golpe a esta presunta red dedicada al tráfico ilícito de bienes culturales”, lanzó la fiscalía en un mensaje a la prensa. En la detención del fin de semana, fueron interceptados con 166 piezas arqueológicas prehispánicas en su vehículo.
Durante 12 horas, agentes fiscales registraron la casa en Antigua Guatemala de Stephanie Allison Jolluck y a Giorgio Salvador Rossilli, donde además de localizar las piezas se les incautó documentos.
Juan Carlos Velasquez, abogado de los estadounidenses dijo que no hablaría del caso pero que a su criterio el allanamiento era algo que tenía que hacer la fiscalía si tenía indicios. “No estoy autorizado para hablar en este caso que está bien delicado”, dijo.
La Fiscalía de Delitos contra el Patrimonio Cultural de la Nación detalló que durante la diligencia se hallaron 722 piezas de diversos tamaños y materiales como jade y basalto entre otras. Además, 500 piezas arqueológicas de pequeñas dimensiones y un ave disecada que, a la espera de los análisis técnicos, presumen que sea quetzal, especie nacional protegida.
Jolluck es una fotógrafa conocida en la comunidad de extranjeros que viven en Antigua. Fue detenida por primera vez hace una semana en el Aeropuerto Internacional la Aurora, cuando intentaba salir de Guatemala hacia Estados Unidos con reliquias mayas en su equipaje. Un juez la dejó en libertad, le prohibió acercarse a lugares de venta de arqueológica y la ligó a proceso por el delito de tráfico de tesoros nacionales.
Tres días después de ser liberada Jolluck volvió a ser detenida junto a su pareja cuando transportaba 166 piezas de arqueología. Rossilli es un experto reconocido y curador de arte popular maya. La juez Sherly Figueroa dejó a ambos en libertad con una fianza de 6.400 dólares. Rossilli declaró en audiencia ante la juez que por ser extranjero no reconocía la diferencia de una pieza original de una de manufactura reciente.
Las piezas arqueológicas que fueron incautadas en el allanamiento fueron entregadas a la Dirección General de Patrimonio Cultural y Natural del Ministerio de Cultura y Deportes, para su resguardo, custodia y análisis correspondiente, explicó el Ministerio Público.
JFF