Los Ángeles.- Poseer acciones de Tesla este año no ha sido nada fácil para los inversionistas.
Las acciones del productor de vehículos eléctricos han caído casi 70% desde el inicio del año y están encaminadas a terminar entre las cinco con mayores descensos en el índice S&P 500. En comparación, el índice de referencia ha caído aproximadamente 20%.
Aunque las ganancias de Tesla siguen aumentando, las señales de menor demanda y más competencia tienen a los inversores preocupados. Y luego está la adquisición de Twitter por parte de su director general, Elon Musk. Algunas de las acciones de Musk desde que tomó control de la red social, entre ellas eliminar una estructura de moderación de contenido creada para abordar el lenguaje que incita al odio y otros problemas en la plataforma, han desconcertado a anunciantes de Twitter y alejado a algunos usuarios.
Eso avivó preocupaciones en Wall Street de que Twitter quita demasiada atención del multimillonario y posiblemente ofenda a clientes leales a Tesla.
La adquisición de Twitter por parte de Musk provocó una tormenta política y el deterioro de la marca de Tesla y Musk, lo que llevó a una “debacle total para las acciones”, escribió esta semana el analista de Wedbush, Dan Ives, en una nota de investigación.
Musk dijo que planea quedarse como director general de Twitter hasta que encuentre a alguien dispuesto a reemplazarlo.
Pese la estrategia de Musk en Twitter, los resultados de Tesla han sido sólidos este año. La empresa de Austin, Texas, publicó ganancias respecto del año pasado y mayores ingresos en los tres primeros trimestres del 2022, incluso más del doble en sus ganancias del tercer trimestre comparado con el año previo.
Aun así, modelos de vehículos eléctricos de otros productores de autos comienzan a quitarle a Tesla el dominio del mercado de vehículos eléctricos estadounidense. Del 2018 al 2020, Tesla tenía un 80% de dicho mercado. Su participación cayó a 71% en 2021 y sigue descendiendo, según datos de S&P Global Mobility.
JFF