Vilna, Lituania.- Con la guerra de Rusia contra Ucrania en su decimoséptimo mes, y con los países occidentales enviando cada vez más armas y municiones de alta tecnología y largo alcance para ayudar al presidente Volodymyr Zelensky a defender su país, es fácil confundirse sobre la posición de la OTAN.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, el principal funcionario civil de la alianza de defensa más grande del mundo, elogia habitualmente a los países aliados por ayudar a las fuerzas ucranianas en su contraataque, pero cuando lo hace, Stoltenberg habla de países miembros individuales, no de la OTAN como organización.
Mientras la OTAN comienza el martes una cumbre de dos días en la capital de Lituania, este es un vistazo a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y lo que está haciendo para ayudar a Ucrania.
APOYO DE LA OTAN, SOLO NO LETAL
La alianza militar de 31 naciones solo brinda apoyo no letal a Ucrania: combustible, raciones de combate, suministros médicos, chalecos antibalas, uniformes de invierno y equipo para contrarrestar las amenazas químicas y biológicas, así como de minas y drones.
La OTAN toma sus decisiones por consenso, y no todos los países miembros están de acuerdo en enviar armas. La alianza no impone sanciones, aunque algunos de sus miembros sí lo hacen a través de otras organizaciones, como la Unión Europea.
UNA POSIBLE MEMBRESÍA FUTURA DE UCRANIA
La OTAN está ayudando a las fuerzas armadas de Ucrania a actualizarse, al pasar del equipo y la doctrina militar de la era soviética al equipo moderno de la OTAN, para permitir que su ejército se acople sin problemas con las fuerzas aliadas. La OTAN también está ayudando a Ucrania fortaleciendo sus instituciones de defensa y seguridad.
Esa asistencia está diseñada para garantizar que Ucrania pueda unirse a la OTAN en un futuro, mucho después de que termine la guerra actual. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y sus homólogos reunidos en una cumbre en la capital lituana de Vilna han prometido que tarde o temprano, Ucrania será uno de los miembros de la OTAN.
PREPARACIÓN DE LA OTAN EN LA REGIÓN
El objetivo principal de la OTAN desde que Rusia comenzó a reunir sus tropas alrededor de Ucrania en 2021 ha sido reforzar su propio territorio, en particular los países en su flanco oriental —cerca de Rusia, Ucrania y Bielorrusia—, desde Estonia en el norte hasta Rumania en el Mar Negro.
Con la guerra ahora en su decimoséptimo mes, la OTAN quiere disuadir al presidente ruso Vladímir Putin de ampliar el conflicto al territorio aliado más al oeste.
En este momento, alrededor de 40.000 soldados de la alianza occidental están en estado de alerta en su flanco oriental. Cerca de 100 aviones surcan los cielos cada día y un total de 27 buques de guerra han estado operando este mes en los mares Báltico y Mediterráneo. Esos números seguramente aumentarán.
Según los nuevos planes de defensa que se analizan en Vilna, la OTAN pretende tener hasta 300.000 soldados listos para trasladarse a su flanco oriental en un plazo de 30 días. Los planes dividen su territorio en tres regiones: la zona más al norte y atlántica; una zona al norte de los Alpes; y otra en el sur de Europa.
PAÍSES MIEMBROS
Las fuerzas y pertrechos que moviliza la OTAN para su propia defensa proceden de los países miembros. La OTAN no tiene armas propias. Sus acorazados, aviones de guerra, misiles y sus más de 3 millones de soldados son suministrados por los países miembros, en su mayoría a su propio costo.
El único equipo que tiene la OTAN como propio es una flota de aviones de radar de alerta temprana y algunos drones de vigilancia.
La OTAN, con sede principal en Bruselas y base militar en Mons, Bélgica, está abierta a cualquier nación europea que quiera unirse y pueda cumplir con sus requisitos y obligaciones. Finlandia ingresó en abril y su vecino nórdico, Suecia, está a punto de unirse a sus filas.
La Unión Soviética, durante la Guerra Fría, y Rusia han sido las principales preocupaciones de la OTAN desde que la organización se fundó en 1949, y en muchos sentidos Rusia y sus aliados siguen siendo la razón de ser de la OTAN.
LA PRESENCIA DOMINANTE DE EU
Estados Unidos es sin duda el miembro más grande e influyente de la alianza. Gasta más en su propio presupuesto militar que todos los demás países juntos. También paga casi una cuarta parte de la financiación común de la OTAN para infraestructura y equipos de propiedad colectiva.
Por lo tanto, Washington tiene mucho más peso sobre cómo se manejan las cosas, y los aliados más pequeños anhelan entrenar y trabajar con las fuerzas norteamericanas porque ello les da acceso a equipos y experiencia que no pueden pagar por sí solos.
EL PAPEL DE STOLTENBERG
El Consejo del Atlántico Norte se reúne a nivel de embajadores la mayoría de las semanas en Bruselas, y con menos frecuencia a nivel ministerial y de jefes de Estado, y está presidido por Stoltenberg.
En esencia, el ex primer ministro noruego dirige la sede de la OTAN, ubicada cerca del aeropuerto de Bruselas, un edificio enorme y cavernoso cuya construcción costó más de mil millones de euros.
Stoltenberg no da órdenes a los aliados. Su trabajo es fomentar el consenso y hablar públicamente como una sola voz que represente a los 31 miembros.
CLÁUSULA DE DEFENSA COMÚN
En la práctica, la OTAN ha contribuido a mantener la paz en los Balcanes y ha luchado contra la insurrección dirigida por los talibanes en un Afganistán devastado por la guerra antes de que el grupo tomara el control del país, la mayor operación de la historia de la alianza. Esta operación se puso en marcha después de que Estados Unidos activara su cláusula de defensa común “todos para uno y uno para todos” tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Es la única vez que se ha utilizado la cláusula, conocida como artículo 5. Esa garantía de seguridad es la razón por la que Finlandia y Suecia buscaron unirse a la OTAN y por la que Ucrania y otros países de Europa también quieren ingresar.
OTAN prepara una nueva estrategia ante amenaza de Rusia
A raíz de la invasión de Rusia a Ucrania, la OTAN elaboró el martes la más profunda reestructuración de su estrategia desde el fin de la Guerra Fría para el caso de un ataque ruso.
Los planes altamente secretos detallan cuáles de los 31 países miembros de la alianza militar occidental serán llamados a responder a un ataque desde las zonas de los mares Ártico y Báltico, por el Atlántico norte y hasta el Mar Mediterráneo y el Mar Negro.
JFF