Vilna, Lituania.- El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy elogió los nuevos compromisos de enviar armas y municiones para combatir la invasión rusa, al tiempo que expresó su decepción por la falta de un camino claro para el ingreso de su país a la OTAN, que concluyó su reunión anual el miércoles.
“La delegación ucraniana regresa a casa con una victoria significativa para la seguridad de Ucrania, nuestro país, nuestro pueblo, nuestros niños”, dijo, flanqueado por el presidente estadounidense Joe Biden y otros mandatarios del Grupo de los Siete, las potencias democráticas.
Biden dijo por su parte que la unidad de los aliados occidentales “no flaqueará” en la defensa de Ucrania. “Se los prometo”, añadió.
Dijo que Lituania conoce el “poder transformador de la libertad” después de pasar décadas bajo la férula de Moscú. Trazó paralelismos entre la lucha de Lituania para escapar del régimen soviético y la lucha de Ucrania para rechazar la invasión rusa, destacando la importancia de contar con aliados para enfrentar el desafío.
“Estados Unidos jamás reconoció la ocupación soviética del Báltico”, dijo en medio de fuertes aplausos de miles de personas en un patio de la Universidad de Vilna decorado con banderas estadounidenses y lituanas. Más espectadores estaban reunidos en una plaza donde se había instalado una pantalla gigante.
El presidente dijo que la respuesta de Estados Unidos y los aliados a la invasión es un modelo para responder a otros retos globales, desde el cambio climático hasta el ascenso de China, porque las posiciones de los países se refuerzan cuando “construyen la alianza más amplia y profunda”.
Una declaración conjunta del G7 sienta las bases para que cada nación negocie acuerdos para ayudar a Ucrania a reforzar sus fuerzas armadas en el largo plazo. Zelenskyy dijo que la iniciativa es un puente hacia la eventual membresía en la OTAN y un disuasivo para Rusia.
“Nuestro apoyo se prolongará largamente en el futuro”, dijo Biden. “Ayudaremos a Ucrania a construir una defensa fuerte, capaz”.
Los líderes de la OTAN crearon un nuevo foro para profundizar los lazos con Ucrania llamado Consejo OTAN-Ucrania. La intención es que sea un organismo permanente de consulta entre los 31 miembros y Ucrania, que puede convocar a reuniones en situaciones de emergencia.
La OTAN está haciendo esfuerzos para acercar a Ucrania lo más posible a la alianza militar sin darle el ingreso. El martes, los mandatarios dijeron en un comunicado sobre las conclusiones de la cumbre que Ucrania podrá ingresar “cuando los aliados estén de acuerdo y se cumplan las condiciones”.
“Hoy nos encontramos como iguales”, dijo el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en conferencia de prensa junto con Zelenskyy. “No veo la hora en que nos reunamos como aliados”.
El ambiguo plan para la futura membresía de Ucrania refleja las dificultades de llegar a un consenso entre los miembros actuales mientras continúa la guerra, y ha sido motivo de frustración para Zelenskyy, aunque agradeció las promesas de armamentos del G7.
“Los resultados de la cumbre son buenos, pero si hubiera una invitación, serían ideales”, dijo Zelenskyy por intermedio de un traductor. Añadió que el ingreso a la OTAN sería “un factor motivador importante para la sociedad ucraniana” en la resistencia a Rusia.
A pesar de su desilusión, el presidente ucraniano se mostró más conciliador el miércoles que en la víspera, cuando dijo que la falta de plazos para el ingreso era algo “sin precedentes y absurdo”.
“La OTAN nos necesita tanto como nosotros necesitamos a la OTAN”, dijo en la conferencia con Stoltenberg.
JFF