El Papa Francisco urgió ayer un alto al fuego en la Franja de Gaza y pidió pensar en todos los niños involucrados en esta y otras guerras.
Esto está matando su futuro, lamentó el Pontífice tras el Ángelus desde la plaza de San Pedro, en el Vaticano, desde donde mostró su preocupación por la “grave situación en Palestina e Israel, donde tantas personas han perdido la vida”.
“Les pido que se detengan en nombre de Dios, cesen el fuego”, reclamó, para subrayar que espera que “se sigan todas las vías para evitar una prórroga” del conflicto, que “se socorra a los heridos” y que “la ayuda llegue a la población de Gaza” que se enfrenta a una “gravísima” situación humanitaria.
Esto está matando su futuro”, lamentó el Pontífice tras el Ángelus desde la plaza de San Pedro, en el Vaticano, desde donde mostró su preocupación por la “grave situación en Palestina e Israel, donde tantas personas han perdido la vida.
El Pontífice también demandó la liberación “inmediata” de los rehenes secuestrados por Hamás.
Por otro lado, Francisco expresó su cercanía al pueblo de Nepal que “sufre por el terremoto” del viernes que dejó más de 150 muertos y a las víctimas de las tormentas e inundaciones en Italia y otros países.
Asimismo, manifestó su apoyo a los refugiados afganos “que encontraron refugio en Pakistán y ahora no saben a dónde ir”, todo ello en medio de una represión en el país contra los migrantes irregulares, lo que ya ha supuesto la expulsión de 200 mil afganos, según el Ejecutivo pakistaní.
(Con información de Europa Press)
Gsz