Buenos Aires.- La batería de medidas económicas que el gobierno del flamante presidente argentino Javier Milei anunciará el martes supondrá un drástico recorte fiscal a partir de la revisión de los contratos y la eliminación de privilegios en la administración pública.
Así lo anunció Manuel Adorni, vocero del mandatario, al dar cuenta a la prensa de la primera reunión de gabinete que tuvo lugar el lunes y en la que los funcionarios asistentes evaluaron las medidas que el ministro de Economía, Luis Caputo, dará a conocer y son esperadas con expectación por los mercados.
“El descalabro de la economía fue el título de la reunión de gabinete”, dijo Adorni.
Milei, un economista ultraliberal que lidera el partido La Libertad Avanza, asumió la víspera anunciando que ejecutará un drástico y doloroso ajuste para reducir el déficit, atajar la galopante inflación y enderezar la economía.
“Las medidas van a ir en línea con un fuerte recorte fiscal, con alguna expansión en las partidas sociales; será acompañado con una quita de privilegios que el presidente dio la orden de realizar con urgencia”, señaló el vocero sobre el contenido de las reformas que evaluaron Milei, el jefe de Gabinete Nicolás Posse, la vicepresidenta Victoria Villarruel, la secretaria general de la Presidencia Karina Milei y varios ministros.
Adorni explicó que en el marco de un reordenamiento del Estado, el nuevo gobierno armará un inventario general, “no sólo de bienes y recursos físicos, sino también un inventario con el estatus de todo el personal de la administración nacional” y además revisará todos los contratos vigentes para detectar aquellos que sean irregulares.
“Se van a revisar cada uno de los contratos en cada uno de los ministerios, también se van a revisar los contratos con universidades y se va a comenzar a exigir el ciento por ciento de la presencialidad en los lugares de trabajo en la administración pública nacional”, apuntó el vocero.
Previamente el portavoz de Milei había señalado que como un ejemplo de la política de austeridad que se avecina, en el sector público no habrá cabida para el “empleo militante” derivado de nombramientos que responden directamente a la política.
“La mayor parte de la gente que trabaja en el Estado es válida, es necesaria y muchas veces ha sido dejada de lado. Lo que vamos a combatir es el empleo militante que esté por una cuestión política, esta lógica de premiar al que no trabaja”, afirmó Adorni.
Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos, dijo a The Associated Press que los lineamientos que dio a conocer el vocero son “importantes y más simbólicos que otra cosa” y que es de esperarse que el martes el gobierno anuncie el paquete íntegro de medidas con el que pretende “generar un ahorro fiscal como el que hace falta”.
Milei señaló en su primer discurso como presidente que “de 15 puntos del déficit fiscal, cinco corresponden al Tesoro Nacional y 10 al Banco Central” y que “la solución implica un ajuste fiscal en el sector público nacional de 5 puntos del PBI”.
Adorni también remarcó que Argentina está inmersa “en una profunda crisis económica” y que durante la actual gestión habrá un respeto a rajatabla del equilibrio fiscal. “Cuando uno gasta más de lo que tiene se deriva en emisión, que a su vez deriva en inflación o si no en financiamiento”.
Milei, quien está decidido a concretar una reforma profunda de la economía y de la estructura del Estado, también prepara el anuncio de políticas monetarias para reducir la suba de precios que es de más de 142% anual.
El ultraliberal dijo al respecto que la inflación “viaja a un ritmo de entre 20% y 40% mensual para los meses entre diciembre y febrero” y que el gobierno de su antecesor, el peronista Alberto Fernández (2019-2023), dejó al país sudamericano al borde de una hiperinflación.
En una muestra de que el gobierno no ha emprendido aún reformas de calado, especialmente en el mercado de cambios donde rigen fuertes restricciones para la compra de divisas, el Banco Central decidió que en la jornada “las operaciones de cambio serán analizadas y cursadas en función de las prioridades”.
“La medida fue dispuesta en función de dar tiempo a la gestión del Poder Ejecutivo de cumplir con los trámites administrativos para la conformación de las nuevas autoridades y anunciar e implementar las políticas que llevarán adelante”, indicó el Banco Central en un comunicado.
Tiscornia apuntó que la medida supone en la práctica “un feriado cambiario” y que es usual en Argentina “cuando hay momentos muy críticos y hasta que se toman las decisiones”.
El designado director de la entidad financiera es Santiago Bausili, quien afirmó tres días atrás que no la cerrará —como había anticipado Milei—, pero que trabajará para reconstruir su independencia y que deje de financiar al tesoro nacional.
Milei había ratificado pocas semanas atrás su intención de cerrar el Banco Central por considerarlo responsable de la emisión sin freno y la escalada de precios, pero esa decisión ha quedado descartada por ahora, lo mismo que una dolarización de la economía.
JFF