Caracas.- El gobernador del estado venezolano de Zulia, Manuel Rosales, presentó su candidatura para las elecciones presidenciales tras retirarle el respaldo a la postulante unitaria de la oposición Corina Yoris, cuya candidatura no pudo ser registrada.
En su primera aparición pública tras su inscripción, Rosales indicó el martes que no fue una decisión fácil.
“Ayer (lunes) en la noche hasta los últimos minutos estuvimos insistiendo en la posibilidad de inscribir la candidatura que anteriormente se había escogido (la de Yoris) y no fue posible hacerlo y faltaban pocos minutos cuando decidí entre irme al Zulia a vivir en la comodidad como gobernador del estado o salir a darle la cara a Venezuela”, indicó Rosales en una conferencia de prensa.
“No vengo a sustituir a nadie, no vengo a quitarle el liderazgo a nadie, no vengo a apartar a nadie; vengo con los brazos abiertos para reconstruir a Venezuela”, agregó, sin explicar cómo logró acceder al sistema de postulaciones.
El anuncio del registro de Rosales se produjo después de que la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), el principal bloque opositor, denunció el martes en la madrugada que las autoridades electorales no permitieron inscribir la candidatura de Yoris.
Omar Barboza, secretario ejecutivo de la PUD —que desde 2021, con el apoyo de Washington, adelantaba conversaciones con representantes del gobierno de Nicolás Maduro— indicó que desde el jueves, cuando se abrió el proceso de inscripción de los candidatos, “no nos han permitido acceder al sistema de postulaciones”. El plazo de inscripción finalizó el 25 de marzo a la medianoche.
“Que quede constancia de esta violación al derecho de la mayoría de los venezolanos que quieren votar por el cambio y se les impide votar por un candidato”, acotó Barboza en un video divulgado en las cuentas de la PUD en las redes sociales.
“Exigimos que se restituya el plazo para postular que es nuestro derecho”, agregó el bloque opositor en su cuenta en la red social X.
En los últimos días la PUD denunció que la página en internet del Consejo Nacional Electoral (CNE) —a cargo de organizar los comicios del 28 de julio— mantuvo bloqueado el ingreso al sistema de postulaciones electrónicas a los representantes de las organizaciones políticas Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y Un Nuevo Tiempo (UNT), las únicas habilitadas por la autoridad electoral para registrar candidatos por ese sector de la oposición.
En la tarde del martes, sin embargo, el presidente del CNE, Elvis Amoroso, indicó que la MUD registró a Edmundo González como candidato. No hubo comentarios inmediatos de la Plataforma Unitaria, poseedora de esa tarjeta electoral.
Barboza, miembro fundador junto a Rosales de UNT, no mencionó que el gobernador tuviese la intención de inscribir su candidatura apartándose de su compromiso de apoyar a Yoris. Tampoco aludió al registro de otro postulado. El CNE informó que UNT inscribió a Rosales mediante el sistema automatizado.
Los principales partidos opositores venezolanos, que en los últimos años se fragmentaron, dejaron de lado sus divisiones el año pasado para apostar por un candidato de unidad que compitiese con Maduro.
La elegida en las primarias de octubre con más del 90% de los votos fue la exlegisladora María Corina Machado, sobre quien pesa una inhabilitación para ejercer cargos públicos por 15 años que le impuso la Contraloría General, controlada por el gobierno.
El viernes, acosada por la inhabilitación y el arresto de integrantes de su equipo de campaña, Machado nombró como su sustituta a Yoris, una académica y profesora universitaria jubilada de 80 años.
“En este momento el país está procesando una enorme decepción, la gente se siente burlada”, dijo Machado el martas a periodistas. “Es demasiado burdo, es demasiado oscuro, es demasiado grotesco y el país lo rechaza profundamente”, agregó y descartó apoyar a Rosales: “mi candidata es Corina Yoris”.
Rosales volvió a la escena política en diciembre de 2016 tras ser liberado de prisión como parte de las condiciones de la oposición en la mesa de diálogo que mantuvo entonces con el gobierno y que tuvo al Vaticano como principal facilitador. Esas conversaciones acabaron sin acuerdos que pusieran un fin definitivo a la crisis política, económica y social que azota al país.
Rosales, quien perdió ante el fallecido expresidente Hugo Chávez en los comicios presidenciales de 2006, huyó al exilio en 2009 después de que la Fiscalía lo acusó de apropiarse de fondos públicos durante su gestión como gobernador entre 2000 y 2008. Se le concedió asilo en Perú y posteriormente se trasladó a Panamá. Siempre negó los cargos y denunció que era un perseguido político.
Tras regresar al país fue de detenido de inmediato en octubre de 2015.
Los críticos de Chávez y de Maduro, su sucesor y heredero político, han acusado al sistema judicial de Venezuela de actuar en concierto con el gobierno para perseguir a sus adversarios.
En años recientes, Rosales y Maduro han mantenido relaciones cordiales, particularmente desde que el político de 71 años ganó por segunda ocasión la gobernación de Zulia en 2021.
Durante los cinco días para oficializar sus postulaciones ante el CNE se registraron 13 candidatos: Maduro, Rosales, González, Luis Eduardo Martínez, Daniel Ceballos, Antonio Ecarri, Juan Carlos Alvarado, Javier Bertucci, José Brito, Claudio Fermín, Luis Ratti, Enrique Márquez y el comediante Benjamín Rausseo. La mayoría de ellos no figuran en las distintas encuestas de intención de voto.
Los candidatos deberán esperar si su postulación es aceptada por el CNE.
El gobierno del presidente colombiano Gustavo Petro expresó el martes en un comunicado su “preocupación“ por los acontecimientos relacionados con la inscripción de “algunas candidaturas presidenciales, particularmente en lo relativo a las dificultades que enfrentaron sectores mayoritarios de oposición… lo cual podría afectar la confianza de algunos sectores de la comunidad internacional en la transparencia y competitividad del proceso electoral” en Venezuela.
Petro, el primer mandatario de tendencia izquierdista en Colombia, restableció relaciones diplomáticas y comerciales con Maduro, a quien su antecesor Iván Duque (2018-2022) tildaba de “dictador”.
Decenas de países, entre ellos Estados Unidos y Colombia, consideran fraudulenta la reelección de Maduro en 2018. Algunos de ellos, como el gobierno de Chile, destacaron que los comicios en Venezuela no cumplieron con “estándares mínimos de una verdadera democracia”.
JFF