Berlín, Alemania.- Uno de los mayores fallos informáticos de los últimos años provocó incidencias de calado en todo el mundo, afectando a aerolíneas internacionales, compañías ferroviarias, bancos y empresas de telecomunicaciones.
En una notificación publicada en su página web, la empresa estadounidense Microsoft indicó que los problemas empezaron ayer a las 19:00 GMT y que afectaron a los usuarios de Azure, su plataforma en la nube, que controlan el software de ciberseguridad CrowdStrike Falcon.
En los aeropuertos de Estados Unidos, Europa y Asia se formaron largas colas cuando las aerolíneas perdieron el acceso a los servicios de facturación y reserva en un momento en que muchos viajeros se van de vacaciones de verano.
En México, la aerolínea Viva Aerobus informó que suspendió vuelos internacionales que estaban programados para este 19 de julio, debido al apagón global relacionado con Microsoft.
El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México no ha informado de afectaciones hasta el momento.
La avería, que al parecer se debió a una actualización de un programa antivirus, impactó también en las “operaciones informáticas” de los Juegos Olímpicos de París, informó el comité de organización del evento, a una semana de la ceremonia de apertura el 26 de julio.
Los medios de comunicación de Australia, donde las telecomunicaciones se vieron gravemente afectadas, dejaron de transmitir durante horas.
Los hospitales y los consultorios médicos tuvieron problemas con sus sistemas de citas, mientras que los bancos de Sudáfrica y Nueva Zelanda informaron de cortes en sus sistemas de pago o en sus sitios web y aplicaciones.
El director general de CrowdStrike, George Kurtz, indicó que los clientes se vieron afectados “por un defecto encontrado en una actualización de contenido de los usuarios de Windows”.
“El problema fue identificado, aislado y se ha aplicado una corrección”, escribió en las redes sociales X y LinkedIn.
La empresa dijo que el problema se produjo cuando implementó una actualización defectuosa en computadoras que ejecutaban Microsoft Windows.
Pero horas después de que se detectara el problema por primera vez, el desorden continuó y se intensificó.
Las acciones de la empresa cayeron un 20% en las operaciones previas a la comercialización.
El Gobierno alemán, basándose en información recopilada por sus funcionarios encargados de ciberseguridad, había indicado poco antes que el fallo se debía a una “actualización defectuosa” de esta empresa.
La agencia de ciberseguridad francesa, la ANSSI, no encontró “evidencias” para sugerir que el fallo se debiera a un ciberataque.
La avería provocó perturbaciones en varios aeropuertos internacionales, cuyos sistemas de facturación sufrieron problemas.
Así, por ejemplo, se formaron multitudes en el aeropuerto alemán de Berlín-Brandeburgo, con cientos de pasajeros esperando indicaciones en plena temporada de vacaciones.
AM