Ciudad de México.- Al cierre de septiembre pasado, los recursos disponibles del principal fideicomiso a cargo de la Sedena, denominado Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar, fueron 4.2 veces mayores que en el último año del sexenio anterior.
Mientras al cierre de septiembre de 2018 este instrumento contaba con 6 mil 174 millones de pesos, para el mismo mes de este 2022, la cifra fue de 32 mil 387 millones de pesos, de acuerdo con un análisis de México Evalúa.
Este fideicomiso está destinado a cubrir erogaciones de adquisiciones de equipo militar, pero también para la contratación de obra pública.
Lo anterior pese a que la Sedena cuenta con programas presupuestarios que se superponen a los objetivos del fideicomiso, como el programa K019, Proyectos de Infraestructura Gubernamental de Seguridad Nacional, o el programa K027, Mantenimiento de Infraestructura.
“La Sedena y el Ejecutivo han optado por usar fideicomisos en lugar de programas presupuestarios, lo que ha limitado la transparencia en el ejercicio de los recursos”, advierte la organización.
A partir de este instrumento se financió parte del Aeropuerto Felipe Ángeles, según la Auditoría Superior de la Federación (ASF), misma que identificó omisiones en la contabilidad del fideicomiso y falta de transparencia en las compras de la mencionada obra prioritaria.
Además del fideicomiso de equipo militar, la Sedena cuenta con otros tres instrumentos: el Fideicomiso de Apoyo a Deudos de Militares Fallecidos, el Fideicomiso a Favor de los Hijos del Personal Adscrito al Estado Mayor Presidencial y el Contrato de Mandato para el Pago de Haberes de Retiro, Pensiones y Compensaciones.
En conjunto, estos fideicomisos sumaron 2 mil 200 millones de pesos, apenas el 6.3 por ciento del total de los instrumentos controlados por la Sedena.
Es decir, el fideicomiso enfocado al desarrollo de infraestructura es el de mayor importancia, no aquellos destinados al personal del Ejército”, enfatiza México Evalúa.
En contraste, de los 10 fideicomisos con mayores recursos a disponibilidad a finales del sexenio pasado, los tres con los montos más elevados en ese momento fueron el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), el Fideicomiso del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM) y el Fondo de Salud para el Bienestar (Fonsabi), con un monto de 301 mil millones de pesos, 140 mil millones de pesos y 114 mil millones de pesos, respectivamente.
Pero el FEIP fue prácticamente agotado, a causa de la desaceleración de la actividad económica en 2019 y la crisis por la pandemia de 2020.
En tanto que el fideicomiso del NAIM fue utilizado para pagar a los acreedores, luego de la cancelación del proyecto, mientras que el Fonsabi sufrió modificaciones a partir de una reforma legal, lo que permitió que sus recursos se usaran para pagar gasto corriente.
Como resultado de ello, al tercer trimestre de este año, el FEIP cuenta con sólo 25 mil 500 millones de pesos, el Fonsabi con 45 mil 900 millones de pesos y el instrumento del NAIM se agotó y extinguió.
Marcha veloz
El Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar, a cargo de la Sedena, contaba al cierre de septiembre pasado con 32 mil 387 millones de pesos.
(Cifras a septiembre de cada año, millones de pesos de 2022)
2018 6,174.5
2019 835.6
2020 34,244.1
2021 24,684.1
2022 32,387.1
Fuente: México Evalúa
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