Los militares son los únicos que podrán entregar víveres, tras una orden que dio AMLO a las fuerzas armadas

Ciudad de México.- A pesar de que las autoridades locales, estatales y federales están rebasadas por el enorme poder de desastre que tuvo el huracán “Otis”, de categoría cinco, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó limitar el reparto de ayuda a los guerrerenses. Lo tienen que hacer solamente las Fuerzas Armadas.

Desde el jueves, en su conferencia mañanera y a pesar de haber estado en Acapulco para ver el tamaño de devastación y necesidades que había para los damnificados, señaló que no quería que la distribución de despensas lo hicieran gobiernos, ni organizaciones sociales, no gubernamentales o hasta la sociedad civil.

“Ya tenemos experiencia lamentablemente en estos casos, queremos que la distribución de las despensas las haga la Secretaría de la Defensa y la Secretaría de Marina, no las autoridades civiles ni del Gobierno federal, ni del Gobierno estatal, ni del Gobierno municipal y mucho menos organizaciones sociales llamadas no gubernamentales o de la sociedad civil.

“Que nadie se aproveche de la necesidad de la gente. En forma directa se va a atender a todo el pueblo, a todos los damnificados de Acapulco”, justificó a pesar de la gran rapiña que se ha desatado a establecimientos establecidos por la gran necesidad en los más de 500 mil habitantes del puerto guerrerense.

Este viernes, el general Luis Cresencio Sandoval, titular de la Sedena, confirmó la orden del presidente tabasqueño. La ayuda tanto pública como privada será tomada por el Ejército y llevada a un centro de acopio en Chilpancingo desde donde será distribuida.

La “estrategia”, según Sandoval, es evitar que esa ayuda llegue directamente al puerto de Acapulco porque generaría “aglomeraciones”.

“Establecimos un centro de acopio en la 35 Zona Militar ahí en Chilpancingo. Ahí estaremos recibiendo la ayuda de la población en general, de los gobiernos de los estados, de la iniciativa privada, de otras organizaciones que quieran colaborar con ese apoyo, ahí estaremos en nuestro centro”, señaló.

“Se estará reorganizando y se estará concentrando con vehículos del Ejército, con tráileres del Ejército hacia acá a Acapulco, para su distribución ordenada, en los diferentes puntos donde se requiera”. 

Sin embargo, este jueves, el periodista Joaquín López-Dóriga confirmó que la fundación Coppel había podido llegar a Acapulco con la ayuda que llevaban. La Cruz Roja publicó en sus redes que también ya se encontraba en el puerto con ayuda humanitaria. 

 HLL

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