El Instituto Nacional Politécnico (IPN) advirtió que no tolerará actos de corrupción tras revelarse que se investiga una red del ramo médico acusada de enriquecimiento ilícito y vincula a dos directivos de esta institución.

Ayer se publicó un informe de la organización Tojil que reporta los vínculos de 84 empresas del ramo médico con dos ex funcionarios del ISSSTE y actuales directivos del IPN, quienes está bajo investigación penal por corrupción y enriquecimiento ilícito derivado de contratos de por al menos 3 mil 300 millones de pesos.

Las denuncias apuntan a Javier Tapia Santoyo, jefe de Administración del IPN, y Marco Ramírez Urbina, coordinador de imagen institucional del Poli.

“El IPN no tolerará ningún acto irregular que empañe el trabajo de esta casa de estudios. Ante cualquier hecho u omisión que afecte la transparencia y honestidad de la institución, se actuará conforme a la ley. En todos los casos, se ratifica que no habrá impunidad”, informó en un comunicado.

“En ningún caso el IPN permitirá que, derivado de actuaciones de grupos o personas ajenas, con fines de desestabilizar la vida académica, se vulneren los principios y se manche el prestigio de la institución”, agregó.

RSV

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