El regalazo del Presidente Andrés Manuel López Obrador a extrabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) terminará costando al erario unos 27 mil millones de pesos.
Se trata de la llamada Compensación Vitalicia por Justicia Social (CVJS), que el Ejecutivo federal creó en agosto de 2022 en favor de más de 7 mil empleados que tenían, entre 19 años 6 meses y 25 años de antigüedad, cuando se decretó la liquidación de la paraestatal en 2009, es decir, no tenían los años de trabajo que el contrato colectivo de LyFC requería para jubilarse.
Desde 2006, el gremio y su dirigente durante 20 años, Martín Esparza, han sido aliados políticos y electorales de AMLO.
El Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep) informó en la Cuenta Pública de 2023 que al cierre de ese año ya se habían pagado 3 mil 537 millones de pesos, y que el estudio actuarial elaborado en diciembre de 2022 –hasta ahora no conocido públicamente–, estimó el pasivo total creado por la CVJS en 26 mil 980 millones de pesos.
En 2023, el Indep pagó mil 802 millones de pesos a 7 mil 133 beneficiarios, un promedio de 21 mil pesos mensuales-aunque hay quienes ganan hasta 75 mil pesos–, y el monto se tiene que actualizar en marzo de cada año según la inflación.
Es probable que el padrón de beneficiarios seguirá creciendo. “Existen personas ex trabajadoras que cumplen con los requisitos para adherirse a la CVJS, pero no han firmado el convenio de incorporación por diversas causas”, advirtió el Indep.
En todo el sistema de prestaciones sociales del país no existe una sola pensión como esta, que no deriva de ley, contrato colectivo o condiciones generales de trabajo, sino de un acto unilateral del Presidente.
Si las o los sucesores de López Obrador no revocan este apoyo, se tendrá que pagar durante décadas, pues algunos de los beneficiarios aún no cumplen 55 años.
Los de más de 65 años, por su parte, no tienen impedimento para cobrar los seis mil pesos bimestrales de la Pensión de Adultos Mayores.
Costo adicional
La CVJS es adicional al costo para el erario de los ex trabajadores de LyFC que ya estaban jubilados en 2009, o que accedieron a esa prestación en años posteriores mediante juicios u otros trámites.
En 2023, el Indep pagó 5 mil 108 millones de pesos a este grupo de casi 16 mil personas, y cuyo mantenimiento es la carga más onerosa que enfrenta esa dependencia, que lleva años pidiendo a las secretarías de Energía y de Hacienda que aprueben cambios al Plan Estratégico para la liquidación de la paraestatal.
Además, los trabajadores de LyFC recibieron la condonación de 6 mil millones de pesos de créditos hipotecarios.
HLL