La candidata demócrata Kamala Harris, y su rival republicano, Donald Trump, llegan empatados a la elección que será clave para el futuro de Estados Unidos, México y el mundo.
Actualmente, la moneda está en el aire y las encuestas no arrojan una posibilidad clara de triunfo para alguno de los dos candidatos. De acuerdo con la investigadora de la Universidad de Indiana Vanessa Cruz-Nichols, es posible que debamos esperar días o semanas hasta conocer el resultado.
“Van a haber situaciones o Estados que quieran hacer un recuento, que quieran contar los votos otra vez, especialmente si hay un margen muy pequeño de diferencia, de menos de 1 %. Entonces creo que al día siguiente, el miércoles, todavía no vamos a saber quién es el Presidente, y tendremos que esperar una o dos semanas para saber más”, explicó a Grupo Reforma.
El resultado, de acuerdo con Cruz-Nichols, dependerá de aquellos electores que no toman en cuenta las encuestas y que es aquel que no ha votado antes, los primeros votantes.
“En 2016, cuando Trump ganó fue porque él pudo atraer a los votantes que están fuera de las ciudades, en las partes más rurales de varios estados. Los votantes blancos que vienen de comunidades fuera de las ciudades fueron primeros votantes en muchos estados y es por eso que las encuestas no fueron muy certeras en 2016”, subrayó.
Las mujeres con estudios están con Harris, mientras que los hombres más jóvenes sin estudios apoyan a Trump.
“Estamos en una época de tremenda polarización. En lugar de ver a las personas con las que no estamos de acuerdo como oponentes, muchas personas ven al otro lado como enemigos y eso es muy peligroso. Siempre ha habido polarización, pero creo que si las llamas habían sido de bajo nivel, creo que han echado gasolina”, indicó Dennis Goldford, profesor de la Universidad de Drake en Iowa.
A 2 días, aviva Trump reclamos de fraude
El ex Mandatario Donald Trump pronunció ayer un discurso cargado de conspiraciones a dos días de las elecciones presidenciales, al sugerir que “no debería haber abandonado” la Casa Blanca después de su derrota en 2020 ante el demócrata Joe Biden.
En el mitin en Lititz, Pensilvania, un estado clave, el magnate hizo sus comentarios más extensos en la recta final de la campaña sobre el supuesto fraude electoral en su contra hace cuatro años.
En sus comentarios, puso en duda repetidamente la integridad de la votación. Además, intensificó sus ataques verbales contra lo que calificó como un Partido Demócrata “demoníaco”
A pesar de que no hay pruebas de que se haya cometido un fraude electoral significativo, en 2020 o ahora, Trump afirmó que los demócratas “luchan muy duro para robar” los comicios.
“Compito contra una persona totalmente corrupta (Kamala Harris), en realidad no compito contra ella, compito contra una máquina corrupta llamada el Partido Demócrata, un partido totalmente corrupto“, afirmó el ex Presidente.
Algunos de sus aliados, en particular Steve Bannon, han alentado a Trump a declarar la victoria prematuramente mañana por la noche después del cierre de las urnas, incluso si la contienda es demasiado temprana para predecir un ganador.
Se trata de una estrategia similar a la que el magnate usó hace cuatro años, iniciando meses de negación y mentiras que culminaron en la insurrección del 6 de enero de 2021.
DMD