“Que todo mundo se entere”, dijo entre risas mientras sus amigos contaban el número de fotos que llevaban con las edecanes. Con pilotos eran pocas, pero con las muchachas más de 5 fotos.
Erick y Ángel no eran los únicos que tomaban fotos para sus redes sociales, otros asistentes al Rally hacían lo mismo. “Pues aquí está fácil tomarse las fotos porque hay chavas en todos lados”, comentó uno de los jóvenes.
Dentro y fuera del Poliforum las modelos y edecanes caminaban por los pasillos como pasarela. Las más solicitadas eran las chicas de la bebida Monster.
Pero, ninguna se salvaba de los piropos que los amantes del rallismo, y de los recuerdos para sus redes soltaban cuando se las encontraban.