El Arzobispo emérito de León, José Guadalupe Martín Rábago, en una misa con ex seminaristas exhortó a los fieles católicos a fortalecer la fe.
Llamó a los papás a dar una mayor atención a los jóvenes y a estar más preparados para dar respuesta a sus interrogantes sobre la vida y sobre la fe católica.
“Los jóvenes en la actualidad tienen una mentalidad más crítica; buscan una respuesta que los convenza desde un punto de vista de la razón, por ello es necesario conocer lo que es el Catecismo de la Iglesia católica”, dijo Monseñor, quien el miércoles recibirá a su sucesor en la Arquidiócesis de León.
Ayer por la tarde celebró la misa en la capilla de la Virgen de La Luz, anexa al templo Expiatorio, con más de medio centenar de ex seminaristas.
“Lamentablemente en el ambiente general, la ignorancia sobre lo que es nuestra fe con mucha frecuencia nos confunden”, dijo al referirse a predicadores de otras religiones que buscan adeptos.
Monseñor recordó que en América Latina hay una gran fe pero que debe fortalecerse, recordó al Papa Benedicto XVI, que en una entrevista dijo que en “América se vive la fe gozosamente; es un ambiente festivo que brota desde el corazón, pero preciso que este continente madure en una fe más sólida”.
A los ex seminaristas les recordó que cualquiera puede ser cristiano y apóstol de Jesucristo de diversas formas, siempre y cuando vivan dentro de la espiritualidad de la fe y que den testimonio de esa fe en la vida diaria, con buenas acciones.
Exhortó también a los fieles católicos a fortalecer la fe asistiendo a las misas dominicales, no por compromiso, ni como una carga, sino convencidos de sí mismos.
“Sin la Sagrada Eucaristía no podemos mantenernos firmes. La vida del cristiano es la mejor predicación. Predicar con el ejemplo, siendo respetuosos y justos. Siendo un hombre de fe”.

Se reúne Monseñor con ex seminaristas

Con una comida, ex seminaristas del Seminario Conciliar de León agradecieron al Arzobispo José Guadalupe Martín Rábago sus 17 años de entrega a su labor para reforzar la fe de los católicos.
Se llevó a cabo también una misa encabezada por Monseñor Martín Rábago, concelebrada por los sacerdotes Jesús Salazar Álvarez, Bonfilio Guillén Vargas, Víctor Manuel Mendoza y Carlos Conde González.
En la celebración eucarística, en la capilla de Nuestra Madre Santísima de la Luz, participaron 60 ex seminaristas.
“La permanencia en el seminario deja algo en la sicología y en la espiritualidad de quienes forman parte, bien sabemos que se puede ser apóstol de Cristo no sólo como Sacerdote, sino como muchos de ustedes que luego de una decisión madura y segura formaron sus familias”, dijo durante la homilía monseñor Martín Rábago.
En el marco del Año de la Fe los invitó a disfrutar de las bromas y de la reunión, pero también a ir más allá con la reflexión de haber fortalecido sus convicciones.
Los ex seminaristas ofrecieron sus peticiones por el Arzobispo emérito, por el Papa Francisco, por los compañeros que continuaron el camino del sacerdocio y por los ya fallecidos; la misa finalizó con la entonación del Himno a la Virgencita del Seminario.
Luego de tan emotiva y especial ceremonia religiosa los asistentes se tomaron la fotografía del recuerdo en la Casa de los Ejercicios del templo Expiatorio, donde se llevó a cabo una convivencia y comida.

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