Armados con palos, piedras y machetes están los habitantes de las comunidades indígenas de Oruzcato, Cherato, Cheratillo, 18 de Marzo, Zicuicho, San Benito, San Marcos, San Antonio, San Isidro, entre otras, pues exigen que el encargado del orden de Cherato, Roberto Cerano Cervantes, sea entregado con vida.
En entrevista, Roberto Cerato había comentado: “Estamos cansados de las extorsiones que nos quiere hacer la delincuencia, nos cobran 2 mil pesos por hectárea de aguacate y es algo que no podemos pagar, nosotros no estamos en contra de nadie, que a esas personas las combatan las autoridades competentes y ya, sólo queremos hacerles saber que no se metan con los habitantes de nuestros pueblos y nada más, si quieren estar fuera de la ley que lo hagan, pero que no perjudiquen a nuestra gente”.
Luego de haberse opuesto a las disposiciones de los supuestos delincuentes, Cerano Cervantes desapareció, esto cuando acudió a Los Reyes a realizar sus actividades cotidianas, quien se sabe es capitán retirado del Ejército Mexicano.
Por lo anterior, los comuneros de las poblaciones antes mencionadas se levantaron en armas y la presencia de las Fuerzas Castrenses en la zona se incrementó sobremanera, todo con el objetivo de resolver la problemática que hay en la región.
De esta manera, las personas de Cherato presumen que su líder fue privado de la libertad a la altura de la purificadora “Agua Monarca”, en la avenida Fidel Velázquez, de la colonia Obrera, de esta urbe.
Desde la mañana del sábado 23 del presente mes iniciaron distintas acciones para exigir que Roberto Cerano aparezca vivo, entre ellas el bloqueo de la carretera Los Reyes-Peribán, a la altura de la desviación a Oruzacato.
Luego se retuvo a Jorge Sandoval Rosales, secretario del ayuntamiento y también a Alfonso Suárez, regidor, mismos que fueron soltados gracias a posteriores negociaciones con el gobierno municipal y el estatal.
A raíz de dichos acuerdos ahora se sabe que el compromiso de las autoridades locales y del estado fue que Cerano Cervantes regrese sano y salvo a su hogar, además de destituir al director de Seguridad Pública, Mario Antonio Mendoza Barajas, quien se sospecha está involucrado en la desaparición del encargado del orden, jefe policiaco que extraoficialmente se conoció ya no está en funciones.

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