Tras un proceso de licitación que fue impugnado, el Instituto Federal Electoral (IFE) aceptó ayer el registro de ofertas de cuatro empresas para producir la las credenciales de elector.
De las 23 empresas que originalmente anunciaron su intención de buscar el contrato, finalmente 19 se quedaron en el camino, alegando, entre otras razones, la unilateral disminución de los requisitos de seguridad aparejados a la resolución de las micas.
De hecho, el IFE determinó reducir de 12 mil 800 a  seis mil 400 los pixeles requeridos para la confección de la credencial.
Con el testimonio de Transparencia Mexicana, la dirección ejecutiva de Administración del IFE desahogó ayer el acto de presentación de propuestas en un edificio alterno de Periférico Sur. El Instituto dará a conocer el fallo el próximo 15 de abril. Y desde octubre comenzará la producción de unos 70 millones de credenciales de elector.
El procedimiento para la contratación del servicio para la producción de las credenciales comenzó con la publicación de la convocatoria el 14 de febrero pasado.
Los representantes de las empresas presentaron ante los funcionarios del IFE dos propuestas: una técnica, con muestras de modelos de micas, una económica, con el costo de producción, por unidad y global.
El IFE aceptó las ofertas de Morpho, S.A. con Litho Formas, con un precio unitario de .6580 de dólar y global de 54 millones de dólares; de Nec de México, S.A. de C.V., que ofertó la unidad a .4699 de dólar y el monto total a 38 millones 575 mil dólares.
Grupo Santoro ofertó la producción por unidad .58 de dólar y por 47 millones 613 mil por monto total; Giesecke y Devriente de México S.A. de C.V., por .67 de dólar por unidad y por universo global por 55 millones de dólares.
La supervisión de las propuestas de los representantes estuvo a cargo de Claudia Edith Suárez, subdirectora de Adquisición de la Dirección de Recursos Materiales de la Dirección Ejecutiva de Administración del IFE. Personal de Comunicación Social del Instituto videograbó la sesión, que duró unas cinco horas.
Los licitantes ponían en manos de Edith Suárez una caja con muestras de las micas y con tres o cuatro carpetas con la información técnica de su producto. Los modelos se contaban sobre el escritorio y luego se guardaban en bolsas que eran selladas.
“El proceso (de licitación) ha sido transparente, tal y como lo estábamos esperando. Ninguna objeción”, resumió Rafael Luengo, gerente general adjunto de Morpho, la firma que desde hace años produce las credenciales vigentes.
“Al final del día son eventos que casi siempre son iguales, y prácticamente todos los eventos se fueron llevando conforme a lo estipulado”.

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