Cumple 50 años de pasión y fervor

Como cada año, en punto de las 7 de la noche en el Centro Histórico de la ciudad de Celaya no se escuchó nada más que el repicar de algunos tambores que interrumpían el silencio para llamar a unirse al duelo y la pena de la Virgen María por la muerte de Cristo.
Sentados sobre las principales calles por las que pasaría la Procesión del Silencio, 50 mil personas se dieron cita para ser testigos de uno de los acontecimientos más importantes del País en esta Semana Santa.
“Yo vengo desde Reynosa, Tamaulipas, me dijeron que ésta es la (procesión) más importante y lo que he visto hasta ahorita la verdad sí, es impresionante, aunque dan mucho miedo los encapuchados pero traen imágenes muy hermosas, se siente la tristeza por lo que se recuerda el día de hoy, que es la muerte de Nuestro Señor Jesucristo”, dijo la señora Luz María Ramírez, visitante del municipio durante estas vacaciones.
Este año la procesión fue muy especial, ya que se conmemoran 50 años de que se realiza este evento como parte de la celebración de la Semana Santa.
De acuerdo a Hiram Álvarez de la Rosa, director de Protección Civil, fueron 2 mil 200 los participantes y este año se recibieron a más visitantes que el anterior, esto -dijo- seguramente por el 50 Aniversario de la Procesión.
“Ahorita estamos resguardando el Centro de la ciudad, todas las dependencias operativas de seguridad están participando, recibimos a más gente que el año pasado, estuvimos contabilizando y son alrededor de 50 mil personas”, dijo.
El funcionario informó que en diversos puntos se colocaron ambulancias para atender cualquier contingencia.
También se constató que el operativo en seguridad y tránsito fue extendido a calles por las que ya no había movimiento.
Las banquetas de las calles de Insurgentes, Allende, Morelos, Guadalupe, Hidalgo, entre otras, quedaron completamente inmovilizadas al tráfico vehicular por más de cuatro horas, y en los alrededores se observaba un fuerte dispositivo de seguridad.
Sobre las mismas calles se podían observar los rostros de miles de hombres, mujeres y niños presenciando las luces, imágenes y cientos de cruces tanto de hombres como mujeres vestidos de luto este Viernes Santo por la noche.
Participantes de la Procesión del Silencio, como Francisco Muñoz, se dijeron satisfechos con el privilegio de participar en este evento único.
“Tengo siete años participando en la procesión, para mí es importante, no es una manda, pero es una gran satisfacción porque en mi casa sí respetamos mucho estos días, tratamos de que haya mucho silencio desde el jueves y lo hacemos por respeto y por el significado de la Semana Santa”, explicó.