Corea del Norte dijo el lunes que retirará 51 mil trabajadores norcoreanos y suspenderá las operaciones en un complejo fabril que administra conjuntamente con Corea del Sur, lo que terminaría el último lazo económico con su rival mientras empeoran las tensiones entre ambos países.
La declaración de Kim Yang Gon, secretario del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, no aclaró la suerte de los 475 gerentes surcoreanos que siguen en el complejo industrial de Kaesong.
El aviso fue formulado en medio de amenazas de guerra por parte de Corea del Norte y otras medidas para castigar a Corea del Sur y Estados Unidos por sus ejercicios militares conjuntos. Además, Corea del Norte está molesta por las sanciones que le impuso la ONU tras su prueba nuclear del 12 de febrero.
El complejo combina la mano de obra barata de Corea del Norte con los conocimientos técnicos de Corea del Sur y es el último vestigio de colaboración entre ambos países.
La semana pasada Corea del Norte cerró la frontera a los gerentes surcoreanos y el cargamento destinado al complejo, aunque los gerentes que se encontraban ya en el complejo pudieron quedarse. Más de una decena de empresas surcoreanas, entre las 120 que tienen negocios en Kaesong, clausuraron ya sus operaciones ante la carencia de los suministros necesarios.
“La zona se encuentra ahora en medio de una severa crisis”, dijo Kim, según los medios de comunicación estatales. Agregó que ha sido “reducida a un teatro de enfrentamientos con compatriotas y una provocación militar, al contrario que su naturaleza original y su misión”.
“Es una tragedia que la zona industrial, que favorece la reconciliación nacional, la unidad, la paz y la reunificación, haya sido reducida a un teatro de enfrentamientos entre compatriotas y guerra contra el Norte”, añadió Kim según la agencia noticiosa oficial norcoreana.
La mayor parte de los empleados de Kaesong son mujeres. El complejo es el mayor proveedor de empleo en Kaesong, la tercera ciudad del país. Zapatos y ropa forman el 70% de los bienes producidos; el resto son en su mayoría productos industriales y químicos.
Kaesong es una inusual fuente de divisas para Corea del Norte. El Ministerio de Unificación de Corea del Sur calcula que los obreros norcoreanos de Kaesong recibieron unos 80 millones de dólares en salarios en el 2012.