Corea del Norte apremió ayer a todas las empresas extranjeras y los turistas que se encuentren en Corea del Sur a que se retiren del país debido a que, según dijo, ambas naciones están al borde de una guerra nuclear.
La nueva advertencia parece tener la intención de asustar a los extranjeros a fin de que sus gobiernos exijan a Washington y Seúl que actúen para impedir un conflicto.
Según analistas, un ataque directo contra Seúl es extremadamente improbable y no hay señales abiertas de que el ejército norcoreano de 1.2 millones de hombres se apreste para una guerra, mucho menos para un conflicto nuclear.
Para los observadores, el alud de profecías norcoreanas de destrucción y muerte y los esfuerzos para incrementar la histeria belicista tienen en parte como objetivo impulsar en el País la imagen del gobernante joven Kim Jong Un, quien es relativamente nuevo en el poder, y para mostrarlo como un dirigente militar decidido.
Otra razón podría ser aprovechar las amenazas de guerra para lograr que Seúl y Washington modifiquen sus posturas a políticas amistosas hacia Pyongyang. La semana pasada, Corea del Norte dijo a diplomáticos extranjeros en Pyongyang que a partir del miércoles ya no podría garantizarles la seguridad.
A pesar de las advertencias de una guerra inminente, no había el martes sentido de pánico en la capital de Corea del Norte.
Numerosas personas de todas las edades armadas con palas, no armas, plantaban árboles durante una campaña de forestación. La Bandera nacional ondeaba en la ciudad con motivo del 20mo aniversario del nombramiento del gobernante de Corea del Norte, Kim Jong Il -hoy fallecido- como presidente de la Comisión de Defensa Nacional. En la tarde, mujeres con vestidos tradicionales coreanos bailaron en plazas del País.
El llamado de la Comisión de Paz de Asia Pacífico para que los extranjeros se marchen de Corea del Sur fue el más reciente dentro de una sucesión de declaraciones dirigidas a intensificar el nerviosismo en el exterior sobre las tensiones en la península.
“La situación en la Península Coreana se acerca a una guerra termonuclear debido a las acciones hostiles cada vez más evidentes de Estados Unidos y los belicistas títeres surcoreanos, así como a su proceder para una guerra contra el norte”, dijo la comisión, una organización que se ocupa de asuntos regionales.
‘Es retórica inútil’.- EU
La Casa Blanca calificó el martes de retórica inútil la amenaza de Pyongyang de una guerra termonuclear en la península coreana y los llamados a los extranjeros de Corea del Sur a evacuar el País advirtiéndoles que corren un riesgo personal si estalla un conflicto.
“(Es una) retórica inútil que no hará más que aumentar las tensiones”, dijo el portavoz del presidente Barack Obama, Jay Carney, en su rueda de prensa diaria.
Horas antes, el régimen de Corea del Norte volvió a proferir la amenaza de una guerra termonuclear.
Antes, la Unión Europea también desestimó el riesgo. “Reconocemos que la situación es tensa y potencialmente volátil. Pero nuestra evaluación es que existe un riesgo limitado (…) de un conflicto armado”, dijo un funcionario.
“No hemos visto preparativos evidentes en el Norte para un ataque, y la situación en el terreno en Pyongyang parece calma”, agregó.
En ese sentido, el Embajador de Brasil en Pyongyang, Roberto Colin, dijo que el clima en la capital de Corea del Norte es de normalidad.