Recibe Albergue a niños maltratados

El 90% de los niños que se encuentran en el Albergue Infantil de Irapuato ha sufrido maltrato físico.
Algunos otros llegan porque su familia no tenía los medios necesarios para solventar sus gastos, y otros más son abandonados por sus padres.
Estos niños son canalizados al DIF y a su vez a instituciones donde los protegen de un ambiente que los dañe.
“Actualmente estamos manejando un número de 18 a 20 niños, el problema es que hay mucha rotación por parte del DIF, es por eso que cambia”, indicó Juan Luna, coordinador general del Albergue Infantil.
Explicó que de esos jóvenes, sólo tres son de Irapuato y los demás son de San Miguel de Allende, Guanajuato, León, Salamanca y otras ciudades del estado.
Aseguró que el albergue busca la manera de ayudar a los niños que son víctimas de violencia y abandono por parte de su familia, pues al llegar al albergue se les brinda atención psicológica y la manera de que sigan con sus estudios.
Detalló que los niños reciben apoyo psicológico, atención medica, dentista, oculista, cuentan con doctores de cabecera, manifestando que la integridad del niño es lo más importante.
Juan Luna comentó que se trabaja con sus valores y fomentando su educación, por ello se les manda a la escuela para que puedan superarse.
Un día de un niño en el albergue comienza desde las 7 de la mañana: “Se levantan, hacen limpieza general, desayunan, se bañan, toman clases de regularización, comen y por las tardes se van a la secundaria o la preparatoria”, externó el coordinador de la institución.
Además tienen actividades especiales, como futbol, salidas con el objetivo de ayudarlos a superar las complicaciones que han tenido en su vida.
Enfatizó que muchos de los niños han terminado sus estudios y han salido adelante.
“Hemos tenido varios niños que han destacado aun ya no estando en el albergue. Ahorita uno de los muchachos que estuvo con nosotros terminó su maestría en Guanajuato, fue a Francia, regresó, y ahorita da clases en una universidad de Querétaro”.
Continuó: “Otro de nuestros muchachos es coordinador del Centro de Rehabilitación e Integración Social (CRIS) y tres jóvenes acaban de terminar sus estudios en el ITESI y trabajan en Castro del Río”, concluyó.