En la comunidad Ladrilleras del Refugio, una de las más pobres de León, 420 familias viven de la fabricación de tabique.
Ellos mismos dicen ser los “invisibles” y los marginados por las autoridades.
Grupos inmobiliarios han adquirido terrenos en las inmediaciones de este poblado por donde cruzará el Eje Metropolitano.
Ahora los habitantes temen perder sus fuentes de trabajo y su único sustento debido a que la comunidad ya se encuentra rodeada de nuevos fraccionamientos habitacionales.
“Llegamos a este lugar hace 28 años. Nos expulsaron de la zona urbana de León bajo el argumento que contaminábamos.
“Pero ahora los grandes fraccionadores ya han comprado grandes extensiones de terreno, a bajo precio, en lo que antes eran ejidos, como es Loza de los Padres, Duarte, La Roncha”, señaló José Pilar Rocha Sierra, delegado de Ladrilleras del Refugio.
Lamentó que su comunidad, en la que viven 2 mil 500 personas, algunas en pobreza alimentaria, no cuenta ni con un camino de acceso.
Además, los pobladores extraen agua, que no es potable, de un pozo a 200 metros de profundidad y que es operado por ellos mismos.
Frente a la comunidad, el grupo inmobiliario Pulsa compró terrenos y perfora un pozo a 400 metros de profundidad.
“Tenemos miedo de que nos dejen sin agua. A los fraccionadores les dan todo tipo de facilidades para construir viviendas, sin importar que están cerca de una zona de alta contaminación. Venden casas como si fueran ecológicas”, comentó.
Invaden fraccionamientos
Rocha Sierra señaló que a corta distancia de su comunidad la empresa Sadasi construye un complejo habitacional de más de 15 mil viviendas, entre los que se encuentra Haciendas Viñedo, y que cuenta hasta con un cementerio particular, llamado “Nuestra Señora de la Luz”.
“Impunemente han talado árboles y arbustos; han trasplantado árboles que ya murieron ante la anuencia de las autoridades. Ya sólo falta que nos corran de nuestra comunidad argumentando que estamos contaminando”, añadió con preocupación.
‘No hay oportunidades’
Junto con José Pilar estaba un grupo de vecinos, los hermanos Julio y Ángel Angulo Martínez, quienes señalaron que sólo en campaña los políticos se acercan a ofrecerles el oro y el moro.
“Nos prometen muchas cosas, pero la realidad es que vivimos en extrema pobreza.
“Los grandes fraccionadores han invadido los alrededores con información privilegiada que tienen del proyecto del Tren Interurbano y del Eje Metropolitano y están pagando hasta 200 pesos metro cuadrado”, expresó Julio Ángulo.
Por su parte, Pedro Aguilar teme que sean desplazados por los nuevos fraccionamientos.
“Estamos desesperados. La mayoría de las personas no saben ni leer, ni escribir. No tenemos más trabajo que la quema de tabique y estamos rodeados de nuevos fraccionamientos. ¿A dónde nos vamos a ir?
“Para los pobres no hay oportunidades. Queremos trabajar sin contaminar, pero no tenemos apoyos de las autoridades y ahora los fraccionadores han comprado cientos de hectáreas”.
En Ladrilleras del Refugio hay una sola calle pavimentada.
A través del programa Su Casa, vecinos construyeron viviendas, pero algunos las han perdido en manos de agiotistas.
“Tenemos el caso de una señora que pidió prestados 5 mil pesos para hacer la fiesta de XV años de su hija y dio las escrituras de su casa. Ya debe 80 mil pesos y le dijeron que ya perdió su casa”, manifestó Matilde Anguiano.
Temen expulsión de 420 familias
Habitantes de Ladrilleras del Refugio viven con el temor de ser desplazados de la comunidad debido al incremento de fraccionamientos en los alrededore