Como patrón, emplea hasta 50 personas durante una semana, puede ganar 50,000 pesos en una jornada y siempre, sin variar, carga la etiqueta de “enemigo número uno” de la afición.
Abordado a unos metros del Estadio León, donde ofrece entradas para el juego entre la Fiera y el América, uno de los líderes de la reventa defiende su oficio y confiesa la agridulce sensación de tener ganancias y estar en riesgo de terminar en la cárcel.
Hace 4 años que la falta de un empleo estable para mantener a su familia lo orillaron a encontrar en la reventa una forma de salir adelante. Comparte que su labor es ofrecer boletos de los principales eventos que se presenten en la ciudad, sobre todo deportivos, ofreciendo servicio a domicilio y ahorrarle a la gente varias horas de filas.
“La gente piensa que ganamos mucho y es verdad, en ocasiones nos va muy bien, pero en otras arriesgas tu inversión, pierdes tiempo y al final hasta a la cárcel puedes dar”, señala.
“Además, los policías tienen rato que no cooperan para ayudarnos, así que uno tiene que ingeniárselas para vender sus boletos”.
Revela que su forma de trabajar es contratando a jóvenes que duerman afuera del estadio hasta una semana antes de que se realice el partido; al momento de abrir la taquilla, su trabajo es formarse simulando ser aficionados y de esta forma acaparar el mayor número de boletos.
“En partidos como el de América y Chivas, trabajan conmigo de 20 hasta 50 chavos; les pago 200 pesos, sus comidas y una comisión del boleto”, añade.
Para el duelo de hoy, el revendedor colocaría 300 boletos, sin embargo, la directiva le jugó “chueco”, según dice, y en sólo una hora de venta libre, el miércoles, consiguió apenas 30 entradas. Esperaba una ganancia de $50 mil y ahora apenas alcanzará 10 mil.
“La directiva esta vez no sé cómo hizo la jugada (sic), pero con nada más 55 minutos de venta libre nos pasó a perjudicar en lo que esperábamos iba a ser una muy buena ganancia, pero ni hablar, así es esta chamba y tan pronto comienza el partido, ya hay que estar pensando en qué otro evento de reventa vamos a agarrar para sobrevivir”.
“No soy ningún ratero, la gente decide si nos compra o no”, concluye mientras se cuida de los policías que cuidan las taquillas.
Gana hasta $50 mil con reventa
Como patrón, emplea hasta 50 personas durante una semana, puede ganar 50,000 pesos en una jornada y siempre, sin variar, carga la etiqueta de “enemigo