Convierten en héroe a su papá

El corazón de Antonio Sánchez García, irapuatense de 32 años, voló hacía México al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), centro médico La Raza, para dar vida a otra persona, convirtiéndose en el primer corazón que se extrae en Irapuato y el segundo en todo Guanajuato.
Sus hijos, Jesús y Guadalupe Sánchez Pérez, de 8 y 10 años, fueron los que insistieron a Rosario Pérez Galván, su madre, para que donara los órganos de su papá después de que sufriera un accidente en carretera que lo dejará con muerte cerebral, siendo extraídos los órganos en el Hospital General de Irapuato.
Ma. Isabel Pérez Galván, hermana de Rosario, recordó a Antonio como un buen padre y una persona agradable, que el domingo antes de las 7 de la noche, con la promesa de llegar a ver a sus hijos, perdió la vida ante el derrape de su motocicleta en la entrada de la comunidad El Carmen, en Irapuato.
“Estábamos sentadas en las escaleras, porque los niños estaban diciendo que su papá les iba a traer una pizza, les dijo que ya venía, mi hermana le volvió a llamar y le dijo que ya venía, pero estaba con unos amigos tomando, parece que fue con una de sus tías que le dio la bendición, a lo mejor ya lo presentía”, platicó la cuñada de Antonio.
Sin verlo llegar a casa, en la calle Deportiva #3 de la comunidad, los pequeños Jesús y Lupita fueron a buscarlo, regresando sin su papá y sin saber que era la última ocasión que lo iban a ver con vida.
“Nos vinieron a avisar unas señoras que se cayó de la motocicleta, ya le había pasado, vi mucha gente que corría hacía el lugar, estaba boca abajo, lo queríamos llevar en un vehículo nosotros, pero nos dijeron los policías que no lo moviéramos, mi hermana se puso su cabeza en las piernas, le hablaba pero no contestaba, pensamos que estaba dormido porque hasta roncaba”, recordó.´
Antonio llegó con traumatismo craneoencefálico al Hospital General de Irapuato, donde les informaron que se encontraba grave, mientras Isabel regresó a casa con su mamá para ir a la institución y recibir noticias de su cuñado.
“Mi hermana me dijo que era grave, le dijeron que lo iban a operar, nosotros venimos con el patrón de donde trabajaba mi cuñado, en una tortillería, para ver si nos prestaba dinero para la operación, nos dijo que si pero, me llamó mi hermana y me dijo que ya no lo necesitaba, que tenía muerte cerebral Toño”, compartió.
Mientras su tía cuenta lo que sucedió, Jesús, el hijo más pequeño de Antonio, mira con tranquilidad, mientras sostiene en una bolsita, agua de horchata y frituras, acompañado de sus familiares y vecinos, que no los dejan desde el domingo que sucedió la tragedia.
La decisión se tomó apenas ayer por la mañana, antes de las 10, cuando la familia de Antonio, su esposa Rosario y su hija Lupita, decidieron que donarían los órganos de su papá, comenzando el procedimiento a esa hora.
“Esperaron a que la mamá de Toño decidiera también, porque ella está en México, no la querían dejar fuera de la decisión, nosotros recibíamos las noticias aquí de los familiares que iban y venían, fue algo muy doloroso pero sanador”, señaló.