Uno de los principales motivos por los cuales, los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) no está a favor de la reforma educativa, es porque aseguran que la reforma atenta contra la venta de plazas.
Y es que desde el punto de vista de los dirigentes del Frente Estatal Ciudadano y Magisterial (Fecym), ‘los detractores’ de la reforma argumentan sobre este tema afectaciones laborales y despidos, mientras que la ley cada vez se legitima más en el consenso social que exige una educación de calidad y profesionales que atiendan este servicio.
A través de volantes, el Fecym que diríge la maestra Lucia Olivera Maldonado otorgó esta información a los integrantes del Frente Estatal Ciudadano y Magisterial, a través del cual establecen que la verdadera afectación es para quienes se dedican al clientelismo sindical, para los líderes que viven de la oferta de recursos a jóvenes que se convierten en ‘carne de cañón’ en las movilizaciones y paros programados cada año de manera sistemática.
La especulación sobre una vida laboral estable y la falta de empleos se conjugan para que muchos jóvenes y profesionistas inviertan fuertes cantidades de dinero en la compra de plazas y de esa necesidad laboral, aseguran que viven los líderes, exponen.
Desde el punto de vista de la dirigencia, la evaluación que contempla la reforma educativa debe aplicarse porque es un proceso mediante el cual les dan cuenta de las necesidades, avances y logros alcanzados.
De hecho, puede ser una guía para mejorar la calidad de la educación mediante la estrategia pedagógica adecuada, para el docente, es el punto de partida para la toma de decisiones y él debe ser parte del proceso de evaluación.
Reforma educativa atenta contra venta de plazas
El Fecym repartió volantes para “desenmascarar” a integrantes del CNTE.