Las autoridades federales presentaron escasa evidencia que vincule a un hombre de Misisipí con el envío de cartas cubiertas de ricino al presidente Barack Obama y a un senador republicano de Misisipí, afirmaron sus abogados.
Christi McCoy dijo después de una audiencia el viernes que el gobierno no ha presentado evidencia que pruebe que su cliente Paul Kevin Curtis, poseyera alguna sustancia de ricino o la semilla de la cual la hubiera extraído. Un agente del FBI testificó durante la audiencia que no pudo decir si los investigadores habían hallado ricino en la vivienda de Curtis, y Mc Coy señaló que la evidencia que vincula al hombre de 45 años con el delito hasta el momento se basa en la expresión de sus ideas en el Internet.
Curtis niega rotundamente que hubiera hecho esto y la abogada destacó que no ha visto nada que pruebe lo contrario.
El sospechoso fue escoltado a la sala antes del inicio de la audiencia en un uniforme color naranja y con grilletes. Volteó a mirar a su hija que estaba entre el público antes que comenzara la audiencia y le murmuró, “yo no lo hice”.
La fiscalía deseaba retrasar la audiencia porque aún no se había completado la revisión de la vivienda y el automóvil de Curtis. Asimismo, están pendientes los resultados de las pruebas de ADN y de otro tipo.
La portavoz del FBI, Deborah Madden dijo el sábado que no podía hacer declaraciones sobre lo que encontraron en la casa de Curtis porque es parte de un proceso de investigación.
El hermano del sospechoso, Jack Curtis, y su hija Madison Curtis, de 20 años, observaron el proceso judicial el viernes y dijeron después que no estaban convencidos de que él estuviera implicado en lo que se le acusa, pese a que trataban de mantenerse receptivos ante la información que pudieran recibir.
“Después de una audiencia lo que escuché en este tribunal me parece que la razón que he recibido como evidencia no parece ser suficiente para vincular a mi hermano directamente con las acusaciones que se le han hecho”, señaló Jack Curtis poco después.
Hasta el momento, Paul Kevin Curtis es el principal centro de las investigaciones y la única persona arrestada en relación con el envío de dos cartas y una tercera amenazante a un juez. Pero durante la audiencia del viernes, el agente del FBI, Brandon M. Grant dijo en su testimonio que las autoridades trataban de determinar si había algún cómplice.
Grant señaló que había hendiduras en las cartas que indicaban que alguien había escrito en otro papel sobre la superficie. Estas hendiduras analizadas bajo una luz revelaban las direcciones previas de Curtis en Booneville y en Tupelo, dijo el agente.
Señalan escasa evidencia en caso de ricino en EU
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