Bayern Munich le dio un baile insólito al Barcelona y lo noqueó ayer 4-0 para quedar a un paso de la final de la Champions League.
La maquinaria del Bayern borró a Lionel Messi y compañía, y confirmó que es el mejor club europeo del momento. El Barsa necesitará una remontada épica en la vuelta el 1 de mayo en su estadio Camp Nou.
Thomas Mueller consiguió un doblete (‘25 y ‘82); Mario Gómez (‘49) y Arjen Robben (‘73) agregaron dos más por Bayern, que busca su segunda final al hilo, luego de perder la del año pasado ante el Chelsea.
Aunque el Barsa remontó un 2-0 ante el Milán con una victoria 4-0 como local en los octavos de final, se antoja muy difícil que este Bayern permita eso.
Borussia Dortmund recibe hoy al Real Madrid en la otra semifinal entre alemanes y españoles.
En un partido que tal vez marcó un cambio de mando en el continente, el cuadro bávaro le propinó al Barsa su primera derrota por cuatro goles desde el revés 4-0 ante Getafe en las semifinales de la Copa del Rey, un 10 de mayo de 2007.
“Sabíamos que teníamos el talento para darles pelea”, dijo Robben. “Ellos han dominado en Europa durante los últimos cinco años. Hay que sentirse orgulloso”.
El Bayern se dio un banquete con una endeble zaga azulgrana, que echó de menos a los lesionados centrales Carles Puyol y Javier Mascherano. Gerard Piqué, Marc Bartra, Daniel Alves y Jordi Alba fue desbordados por el empuje de Mueller, Robben, Gómez y Franck Ribery.
“Nos han dado un repaso, tan sencillo como esto”, dijo Piqué. “Son más rápidos y más fuertes”.
Messi, mermado por una lesión muscular, fue titular por primera vez desde el 2 de abril, pero no gravitó en el partido.
Aunque monopolizó la posesión del balón, el Barcelona apenas generó ocasiones claras de gol. Bayern, en cambio, impuso la diferencia con su intensidad y ambición.
¿Qué fue de Xavi Hernández y Andrés Iniesta en el mediocampo azulgrana? No existieron.
El margen de cuatro goles igualó el peor margen de derrota sufrido por el Barcelona en la Copa de Europa. La vez anterior fue un 4-0 ante el Dínamo de Kiev en fase de grupos, en 1997.
Dortmund, sacudido
Los preparativos del Borussia Dortmund para recibir hoy al Real Madrid en las semifinales de la Liga de Campeones se vieron sacudidos por la noticia de que una de sus estrellas se irá del equipo al final de la temporada.
En la víspera de lo que el club considera como “el partido local más espectacular en la historia del Borussia Dortmund”, se anunció que el volante Mario Goetze se irá al Bayern Munich el 1 de julio.
Bayern, que pagará la cláusula de rescisión de Goetze de unos 37 millones de euros (48 millones de dólares), dijo ayer que quería aplazar el anuncio oficial por “respeto” al partido de hoy, pero de todas formas Dortmund quedó aturdido.
La página de Facebook de Goetze se vio inundada por insultos de fanáticos, y Dortmund pidió a sus hinchas que respalden de forma “incondicional” a su mediocampista de 20 años.
El técnico de Dortmund, Juergen Klopp, concluyó su rueda de prensa de ayer con una solicitud directa a los seguidores.
Dijo que Goetze no se va por sus compañeros o el equipo, sino por la oportunidad de trabajar con el nuevo timonel de Bayern, Pep Guardiola.
“No puedo achicarme y empezar a aprender español”, bromeó Klopp.
Estos equipos se encontraron en las semifinales de 1998, la última vez que Dortmund llegó hasta esta temporada; el Madrid se impuso con global de 2-0 para destronar al entonces campeón defensor.