El hostigamiento que los reos viven en el penal La Pila, en San Luis Potosí, desató una riña que terminó en una masacre carcelaria.
Unos 100 presos se enfrentaron la madrugada de ayer en el interior del Cereso estatal, ubicado en la capital potosina, dejando un saldo oficial de 13 reos muertos y 87 heridos, de los cuales 22 fueron reportados como graves.
La directora de Prevención y Readaptación Social estatal, Concepción Tovar Monreal, aseguró en rueda de prensa que se trató de un enfrentamiento entre dos grupos de internos y descartó que se tratara de un motín.
“La riña derivó de un grupo que tenemos por ahí (…) robaban sus pertenencias, robaban su dinero producto de la venta de artesanías, era un grupo delictivo”, comentó la funcionaria.
Precisó que algunos reclusos, hartos de ser hostigados por otros internos, decidieron atacarlos y comenzó la confrontación entre dos grupos rivales.
La riña comenzó a las 4:15 de la mañana del sábado en los dormitorios 4, 5 y 6 del área varonil y se utilizaron tubos y armas punzocortantes para ultimar a los reos. Hacia las 7 de la mañana, la Procuraduría informó que había controlado la situación.
Al lugar comenzaron a llegar ambulancias de diferentes corporaciones para revisar a los internos lesionados dentro del Penal, 9 de ellos ya habían fallecido, otros 4 que fueron trasladados no sobrevivieron.
Doce de los 13 reos fallecidos fueron identificados por sus familiares y a través de huellas dactilares, informó la Procuraduría General de Justicia por la tarde. De ninguno de los reos se detalló su edad ni el delito que estaban purgando en el penal potosino.
En total 87 reos resultaron lesionados, 65 fueron atendidos en el lugar y llevados a las áreas de seguridad del penal y otros 22 con heridas graves fueron trasladaron a dos hospitales de la ciudad en medio de un fuerte dispositivo de vigilancia de la Policía y el Ejército.
Sobre cómo los reos dejaron sus celdas para atacar a sus rivales, Concepción Tovar señaló que se presume que los candados fueron rotos con herramientas que ellos pudieron construir o que alguien les proporcionó.
Por la tarde, el Gobernador priísta, Fernando Toranzo, dio las cifras oficiales de víctimas y señaló que el director del penal, Jesús Martínez Alemán, con todo su personal, está siendo investigado.
“Más que rodar cabezas o pedir la destitución de un funcionario, se debe de aplicar el Estado de Derecho a quienes sean los culpables o hayan hecho alguna omisión, y sancionar conforme a lo que marca la Ley, a quien resulte responsable”, aseguró el Mandatario.
No se reportaron detonaciones de arma de fuego ni resultaron lesionados los custodios del penal.
Algunas mujeres que estaban en visita conyugal fueron desalojadas del penal cuando comenzó la riña y permanecieron afuera junto con los familiares de otros reos que esperaban información sobre el estado de los presos.
La población de La Pila es de unos mil 700 internos y el sitio tiene capacidad para cien más.
Blindan dos hospitales
Elementos de la Policía Estatal y militares instalaron vigilancia especial en el Hospital Central y el Hospital General Soledad de Graciano Sánchez por la llegada de reos heridos.
Desde las 6 de la mañana las ambulancias comenzaron a llegar a los hospitales donde ya había un cerco con más de una treintena de policías vigilando y un grupo militares resguardando la zona.
El área de urgencias del Hospital Central se saturó con la llegada de los primeros heridos y se envió a otros reos al Hospital General de Soledad de Graciano Sánchez.
María Concepción Tovar, directora de Prevención y Readaptación Social en el penal La Pila, informó que la riña inició por la presión de los integrantes de un grupo delictivo hacia los reos.
La vigilancia en los hospitales permanecerá hasta que los lesionados sean dados de alta, para así evitar algún rescate o ataque en los nosocomios
‘Nadie nos dice nada’
Angustia, temor, impotencia y tristeza, vivieron por horas los familiares de reclusos, afuera de las instalaciones del penal La Pila en espera de información de sus parientes.
Desde la madrugada que se informó sobre el motín, los familiares de los reos acudieron al centro penitenciario.
Preocupada y con lágrimas en los ojos, una mujer, cuyo esposo se encuentra en el penal, reclamó la poca información que recibían de sus familiares.
“Nadie nos dice nada, no sacan listas de heridos, ni muertos. Dicen mentiras y uno se tiene que aguantar ya van más de 7 ambulancias que vemos salir y no nos pueden decir nada”, reclamó la mujer de unos 30 años, madre de tres niños.
“Aquí adentro los tratan bien mal los policías. Yo sé que no está ahí por buena gente, pero también tienen derechos. No es el primer motín, ya van varios”, indicó enojada.
Una mujer que prefirió su anonimato, comentó que se encontraba dentro de las instalaciones del penal en visita conyugal, por lo que alrededor de las 5 de la mañana, escuchó muchos gritos de algunos reos, por lo que los custodios la sacaron inmediatamente, sin darle tiempo de poder cambiarse.
“Estaba con mi marido en visita conyugal. Alrededor de las 5 de la mañana, escuché muchos gritos por parte de los otros reos, yo sí sentí mucho miedo, el pleito comenzó en el sector número 6 y vino a parar hasta donde estaba la visita conyugal”, expresó.
Las mujeres que se encontraban en visita conyugal permanecieron fuera de la penitenciaria hasta que tuvieron noticias de sus parejas.
La mamá de uno de los reos llegó con lágrimas pidiendo información sobre la situación de su hijo que tiene 2 años encerrado y aún no recibe sentencia. Ella se enteró de la riña por medio del radio, ya que escuchaba que había muchas patrullas circulando.
En algún momento los familiares de los detenidos trataron de obstruir el paso de más vehículos al penal hasta que se les diera información de los reos.
Después de esperar seis horas, los familiares de los reos los llevó a amenazar con bloquear la carretera si no les proporcionaban la lista de muertos y heridos.
Tuvieron que pasar 8 horas para saber que hubo 13 muertos y 87 heridos de los cuales 22 fueron trasladados a diferentes hospitales de la ciudad.