El PRD secundó al PAN y condicionó también el Pacto por México a que el Gobierno federal responda con acciones concretas a las denuncias por presuntos delitos electorales en Veracruz.
“Sí estamos diciendo que es un impasse en los trabajos correspondientes al pacto, que estamos esperando las respuestas (…) hay que valorar el contenido de la respuesta que dará (el Gobierno) y, a partir de ahí, tomaremos las siguientes decisiones”, sostuvo el líder del PRD, Jesús Zambrano.
El dirigente perredista aseguró que la Cruzada Nacional contra el Hambre muy pronto evidenció su verdadero objetivo, que fue “la compra de votos en los procesos electorales de este año, y el aprovechamiento político en favor del PRI en todas las entidades de la República”.
Ante ello, exigió la renuncia de los delegados de la Sedesol, toda vez que, dijo, la mayoría, iniciando por su coordinador de delegaciones, Pedro de León Mojarro, así como las secretarías federales que manejan programas sociales, tienen una trayectoria de operadores electorales del PRI.
“Se trata pues de un programa que no es de inclusión social, sino de cooptación y manipulación política y electoral”, acusó.
Anunció que, ante esta situación, la Comisión Política Nacional del PRD resolvió exigir al Gobierno federal la destitución y consignación inmediata de todos los funcionarios involucrados en los hechos ya denunciados penalmente por los escándalos de Veracruz.
También pidió apoyar irrestrictamente la exigencia de juicio político que recientemente planteó el grupo parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados en contra de Rosario Robles y el gobernador veracruzano Javier Duarte.

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